1. UNA LINDA HISTORIA 7


    Fecha: 24/05/2020, Categorías: Incesto Autor: memito, Fuente: SexoSinTabues

    ... seria. ― ¿Qué pasa? – le pregunto. ― No puede ser verdad – murmura. Me baja los boxers de un tirón. Se topa con una estaca que empieza a ponerse tiesa, aunque aún tiene un ángulo corto. ― No estarás quebrado o algo de eso, ¿no? ― No. Todo está sano y funcionando. ― Madre de Dios, Sergio, has dejado Salamanca huérfana – me mira y se ríe. ― Mejor para ti, ¿no? ― Claro que si, guapo – se cuelga de mi cuello y me acaricia el pelo de la nuca. -- ¿Has seguido los consejos de las modelos? ― Algunos. ― Pues han acertado. Estás muy bien – me besa, apretándose contra mi polla. Deslizo mis dedos por su espalda, hasta llegar a sus duras nalgas. Las aprieto con fuerza. Ella gime en mi boca. Cuando nos separamos, le bajo el pantalón de un tirón. Un culotte de algodón, también de Nike, me saluda. Nos despojamos de las zapatillas y de la ropa que tenemos en los tobillos. Dena abre el chorro de la ducha. Contemplo su pubis. Tiene un buen matojo de vello púbico, eso si, recortado en las ingles. ― ¿Qué miras? – pregunta con un puchero. ― Ese matorral. Creo que voy a podarlo en la ducha. ― Uuy, nunca me lo he quitado. Solo recortar – se mordisquea un dedo. – Me da como corte… ― Si, un corte es lo que le voy a dar, no te preocupes. Ella se ríe, provocativa, y me empuja bajo el chorro de agua caliente. Más besos y caricias entre el vapor y el agua. Ella se aferra como una desesperada a mi polla, murmurando palabras por lo bajito, como “increíble”, “sota de bastos”, y “la madre de todas las ...
    ... pollas”. Tiene los pezones que deben de dolerle, de tan inflamados que están. Las aureolas son grandes y oscuras, así como los pezones. Os juro que, al menos, miden tres centímetros de alzado. Le meto un dedo en el coño. Es como si una boca me lo aspirara. Está muy mojada. Se frota contra mi mano. Su jadeo se hace más ronco. ― ¿Cuánto hace, Almudena? – le pregunto. ― ¿A qué te refieres? – me mira, los ojos medio cerrados. ― ¿Cuánto hace que no te follan bien follada? ― Sergiiii… demasiado, amor… no sigas, vas a hacer que me corra… ― Quiero que te corras. Estás demasiado ansiosa y no disfrutarás – la aconsejo. – Déjate ir con mi dedo. así… muy bien… La sujeto por la cintura mientras un tremendo escalofrío la recorre, de abajo arriba. Corto el agua y alargo la mano para coger una gran toalla. La seco mientras ella se recupera, y se pone muy mimosa. No le hago caso, apartando sus manos de mi polla. ― Dena, trae unas tijeras, el gel y una cuchilla. No quiero pelos cuando te coma ese coño – le doy un azote en el trasero para que obedezca. Ella da un gritito y sale pitando, desnuda. Cuando regresa con lo que le he pedido, la siento en el inodoro, y pelo ese montón de vello oscuro y rizado, con las tijeras. Embadurno bien de jabón y comienzo a rasurar, lentamente. Ella no deja de mirarme, de recorrer todo mi cuerpo. ― ¡No tienes ni un pelo en el cuerpo! – descubre finalmente, ahora que está más calmada. ― Ajá. Ayer me depiló completamente un mariquita encantador, en un salón llamado ...