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Casi un día normal
Fecha: 28/05/2020, Categorías: Gays Autor: lewisvagi, Fuente: SexoSinTabues
... podía adivinar su calentura pues mi verga estaba siendo quemada del calor que había en su interior. Él se dejaba caer y hacía que ambos rebotáramos en la cama, mi pija casi salía del todo y luego entraba un milímetro más. Exquisito, eso lo puedo asegurar. Mi hermano detuvo su cabalgar y se dejó ensartar hasta lo profundo de su ser, con mi pecho agitado miré esa espalda divina y pude notar como poco a poco con movimiento lento pero seguro fue moviendo su pierna a un lado mío y arrastrando su cuerpo se comenzó a girar, mi pija en su interior era friccionada por las paredes de su membrana y me causo un enorme placer. Paolo miró mi cara y continuó su movimiento hasta estar frente a mi y sus pies a mis costados a la altura de mi pecho, los tomé y llevé sus pies a mi nariz, los olfatee, los lamí y los quería devorar. Un manjar a mis papilas olfativas, un postre para mi boca y en eso mi hermano mayor se tiró hacia atrás dejándose ensartado en mi leño y comenzó un vaivén de sus caderas, algo así como si estuviera bailando un ritmo de esos que bailan los negros en sus danzas de ritual, en el que sus caderas parecieran no pertenecerles a ellos; sino, a un Dios pagano del África y estuviera moviendo al ritmo de los tambores tucutu, tucutu, tucutu; un movimiento salvaje y singular. Mi verga se tensó aún mucho más y podía sentir su próstata al rosarla en su interior y como su verga estaba hacia arriba como obelisco colosal, pude ver cuando comenzó a lanzar un sinfín de disparos al aire ...
... y como su culo se contraía a cada uno de ellos y apretaba mi pija y mi pija frotaba la próstata y su semen salía y nos bañaba por igual. Podía sentir como si fueran gotas calientes de un aguacero en invierno al caer sobre mi y uno y otro y otro y otro más, nuestros pechos se expandían y contraían con tanta excitación, mi verga al ser frotada contra el interior de su ser no tardó en comenzar su baño interior, era imposible que no pasara, su culo me apretaba la base, mi glande frotándolo todo por dentro y todo, todo su intestino me apretaba la pija como el mejor guante de terciopelo que pudiera existir. Derramé en su interior todo el líquido seminal que pudiera tener, mis pelotas fueron estrujadas y vuelto a estrujar; aquello fue amor de verdad. Me incorporé teniendo mi pija metida en el culo de mi hermano mayor y quedando en posición del misionero lo besé, no quería salir de él. Nos besamos hasta que mi verga salió sola, abandonando ese nido tierno y suave que era el culito de mi hermano. Solo nos dijimos un te quiero, un beso suave y tierno y me despedí de él con un sueña bien y me pasé a mi cama. Ahora estoy despierto, veo esa raja llena de pelos y me estoy volviendo a empalmar, creo que me lo voy a volver a pisar. Esto va a volverse casi un día normal. Espero les haya gustado, pues es el relato de un amigo que conocí en el colegió y ambos hermanos son grandes amigos míos ahora. Como saben, eso de los nombres, lugares y otros detalles pues cambian. Hasta pronto y escriban, ...