1. en el cine


    Fecha: 07/06/2020, Categorías: Voyerismo Autor: sayago19, Fuente: SexoSinTabues

    ... inferior en lo que poco a poco soltaba los botones del abrigo, su mano se deslizo dentro de la prenda y fue recorriendo mi piel cálida y temblorosa, sus dedos jugaron con la cavidad de mi ombligo. Casí podía sentir como escurrían a lo largo de los muslos los jugos de mi vientre, mi abrigo está completamente desabotonado, su mano derecha acaricia mi monte de venus intentando hacerme abrir las piernas mientras su izquierda (pasando por atrás de mi cuello) juega con mi erecto y duro pezón. Deja de besarme, su lengua corre por mi cuello, sus labios se cierra en mi oído y muerde con suavidad mi lóbulo entonces escucho su voz: - quítatelo - me dice. Miro hacia ambos lados, para asegurarme que estamos solos, me despojo de la prenda con las manos temblorosas por la excitación. - híncate – ordena, y me arrodillo entre las butacas, mientras él se pone de pie y con firmeza exclama: - “prepárate para darme placer” – Me encanta que me de órdenes, suelto el cinturón, desabotono la prenda y bajo el cierre del mi pantalón liberando su miembro erecto; con avidez comienzo a chuparlo, con lentitud y placer, sosteniéndolo con la diestra a la par que la izquierda acaricia suavemente sus testículos. Mi lengua lame su grueso tronco, surcado ya de venas, mis labios se cierran sobre su glande descubierto (aprovechando para saborear las gotas de su líquido pre-seminal); lo levanto con la mano para que no le estorbe a mi lengua el recorrer su saco escrotal, meter sus bolas en mi boca, tocar con mi ...
    ... pequeña serpiente rosada su periné. Después de varios minutos me detiene y me hace sentar en la butaca separa mis piernas apoyándolas en los descansabrazos; su lengua hace girar mi clítoris endurecido, mientras dos de sus dedos se introducen sin problemas en mi cueva inundada de jugos para comenzar sus movimientos dentro de ella, cierro mis ojos disfrutando las sensaciones mientras juego con mis senos y mis erectos pezones. Entonces, procede a ocupar la butaca contigua y con una seña me coloco sobre él, mi mano estrecha su miembro duro y caliente para guiarlo hacia mi anhelante vagina; al sentirlo dentro de mi, comienzo a montarlo como si fuera mi semental, primero lentamente para después incrementar la velocidad y el ritmo, mis senos brincotean frente a su cara lo cual aprovecha para acariciarlos y besarlos; es deliciosos sentir como su lengua rodea los pezones rosados y duros para después darles pequeñas mordidas con sus incisivos. Sus gemidos y los de la pantalla pasan a segundo plano cuando, a pesar de mi excitación, distingo el típico sonido de unos zapatos de tacón alto. Juan me detiene y me gira para que apoye mi abdomen en el respaldo de enfrente; los tacones aún se escuchan (imagino que están buscando lugar al centro del cine casia nuestra misma altura), sus manos toman mi cadera y poco a poco la cabeza de su firme miembro va abriéndose paso entre mis nalgas, “picotea” mi ano, lo acaricia llenándolo con mis jugos vaginales que bañan esa rica herramienta y así lentamente ...