JUAN: Leyenda urbana. 3 - Relatos Eróticos

JUAN: Leyenda urbana. 3

... alegre. Daniel la miraba excitado deseando follarla nuevamente, pero esta vez se quería tomar las cosas con más calma. “Tengo aún muchas horas, y después la puedo hechizar todas la veces que quiera, vamos a ver cómo reacciona ahora, como se comporta después de haberse convertido en mi puta”, pensó. La hermosa madre estaba plenamente consciente de que se había dejado follar a placer por su crio, que le había jurado ser su puta, pero tanto para ella como para Marta, aquello era algo normal, era como si sus hijos se hubieran vuelto sus esposos, al menos durante los hechizos, era como tener una pareja con la que se tiene sexo como es normal, no era que estuvieran ansiosas de sexo incestuoso todo el tiempo, solo lo harían a petición de sus críos, en el momento y lugar que se los pidieran, haciendo todo lo que se les diera la gana pedirles. Sin embargo para los degenerados adolescentes aquello era diferente, ellos querían follar y follar a sus madres, hacerlas cumplir sus deseos todo el tiempo. Daniel finalmente terminó por entrar en la cocina y se paró junto a la mesa quedando detrás de la hermosa hembra a un metro de distancia. Daniel: Buenos días mami! Silvina volteo un poco asustado por la sorpresiva llegada de su crio, le sonrió muy lindo y amable como siempre. Silvina: Uy mi amor, me espantas! Hola mi niño buenos días, como amaneciste? Cansadito? Daniel: Jaja, no mami, anoche me canse un poco pero hoy me siento como nuevo! Silvina: Uy bebe, anoche te luciste, fuiste toda ...

... una fiera en la cama y eso que fueron tus primeras experiencias. Daniel: Eso crees mami? Te gusto, te he satisfecho? Silvina: Pero claro que si mi amor, me hiciste sentir muy mujer, han sido increíble, tu energía tu juventud, ufff ya eres todo un hombrecito mi niño, y me encanta que te hayas iniciado conmigo. El crio se sintió orgulloso y sonrió feliz, su hermosa madre le guiño el ojo y acercándose a él le dio un lindo y tierno besito en la boca, el chico se sentía en las nubes. Silvina: Siéntate mi vida que ya está el desayuno. Los dos, madre e hijo, comenzaron a comer su desayuno, y ya con toda la confianza del mundo el joven comenzó a sacarle una plática con tintes cachondos a su preciosa madre. Daniel: Mami, cuando estabas casada con mi padre, el té follaba mucho? Te follaba como yo? Silvina: Ay mi amor, tan feliz que amanecí y ya me quieres arruinar el día mencionándome al infeliz de tu padre… ese hijo de puta! Como ya lo saben, los caracteres de Silvina y Marta son contrarios, la primera es mucho más abierta y relajada, mientras que Marta es una dama muy recatada, claro que cuando de complacer a su degenerado crio se trata se transforma. Daniel: No mami, no es mi intención, solo tengo curiosidad, respóndeme! Silvina miro a su hijo sonriendo, finalmente no podía desobedecerlo bajo el hechizo. Silvina: Ay bebe, pues mira, ese infeliz no se compara contigo, lo que anoche me hiciste, con tanta energía, tanta lujuria fue increíble, me llevaste al paraíso, en verdad que me ...