1. LA VENGANZA


    Fecha: 02/10/2017, Categorías: Infidelidad Autor: dulces.placeres, Fuente: SexoSinTabues

    ... su contra, por lo que dejando el arma a un costado me llamó a su lado, me acerqué, estando el sentado llegaba a la altura de mis pechos, así que se dispuso a lamerlos, su lengua filosa pasaba por ellos dejando un húmedo rastro de saliva tras de sí, llegaba a mis pezones rozándolos apenas, sus manos se perdían en mi entrepierna, una por delante atacando la tanga sobre mi pubis y la otra por detrás se colaba bajo ella acariciando mi caliente anillo marrón, todo sutilmente como para hacerme desear demasiado, sin penetrar mi trasero, solo por el contorno, sin tocar mi clítoris, solo por encima de la seda transparente, sin comer mis pechos más de lo necesario. Trataba de disimular mi placer mirando discretamente a los ojos de Rodrigo quien seguía protestando. Mi amante casual era muy guapo, cansado de este jueguito previo tomó el elástico de la pequeña tanga entre sus poderosas manos y tiró de ella hasta arrancarla dejándome totalmente desnuda, al observar mi pubis depilado con las iniciales tatuadas ‘RSE’ miró con desprecio a mi esposo y lo increpó: Tan poco hombre eres para tatuarle tus iniciales a tu mujer? que te hace pensar que te pertenece? El no respondía, solo gemía protestando, el macho comenzó entonces a lamer mi zona íntima, dándome besos cerca de mi placer, mojando sus dedos con mis jugos, lentamente, mi clítoris lo deseaba, era increíble la experiencia que estaba viviendo, gozaba con el sufrimiento de mi marido, los segundos pasaban, dos dedos se habían colado en mi ...
    ... concha que rebalsaba a mares, gesto inequívoco del momento de placer que estaba atravesando, otros dos se habían introducido en mi trasero, movía ambas manos jugando en ellos, su aliento caliente rebotaba en mi botoncito, no podía mantenerme en pié, no podía mantener los ojos abiertos, no podía dejar de agitarme, no podía dejar escapar gemidos, no podía, solo no podía… Rodrigo se dio cuenta de mi estado y comenzó a insultarme: Eras una sucia prostituta! te gusta? negame que te gusta! zorra hija de puta!!! Simplemente lo ignoré ya que en ese momento el extraño me llevó a la cama haciéndome arrodillar con mis rodillas juntas y mi culo hacia arriba, me hizo inclinar arqueándome de modo que mis tetas quedaron contra el colchón, mi esposo tenía el primer plano de toda mi apetecible retaguardia, el intruso se desnudó, de reojo vi una hermosa verga que se preparaba a someterme, escupió su mano y empezó a jugar en mi trasero, tomé aire, se preparaba para dármela por el culo, era mucho para mí, pero solo de imaginar la cara de mi marido esperé deseosa a que lo hiciera. Se paró en la cama sobre mi posición con una pierna a cada lado, para luego ir bajando lentamente su miembro sobre mí hasta sentir la punta posarse en mi esfínter, empujando lentamente. La verdad es que mi culo se había comido tantas pijas que casi sin perder tiempo había ingresado toda por completo, imaginen como gozaba mientras me hacía la cola, sintiendo esa carne dura entrando y saliendo, me apretaba los pezones, mis ...