hermana mia 2 - Relatos Eróticos

hermana mia 2

... bastante larga y mas bien fina, me secó toda, fue por una toalla pequeña humedecida, me lavo y seco yo boca abajo con el culo y las piernas al aire y parte el camisón mojado, le digo: trae otro casmison, lo hizo y me lo cambié, cuando me saqué el húmedo quedo perplejo con mis gordos pechos, no dije nada solo demore la colocación cosa que los observase bien. Su pija ya estaba para comerla, se la agarro la acaricio, todo sin hablarnos, me la paso por la concha mojada y ardiente, la dejo allí apoyada, empuja y me va entrando suave como una caricia adentro de mis entrañas, llega al fondo se queda, le late, pensé acabará ya?, no; me retiro y tomo impulso sigue y bombea instintivamente me coge siento su cabeza horadarme y sus huevos chocar en mi pelvis siento que mi cerebro parece estallar y mi concha si estalla, es mi primer orgasmo con este hijo al que estaba desvirgando, no terminó lo mio que comienza lo de él y se acrecienta de nuevo mi orgasmo que parecía nunca acabaría. Quedó sobre mi, no me pesaba, lo sentí débil, necesitado de mi cariño para recuperar sus fuerzas que habían salido de su cuerpo para entrar en mi, que dicha sentir como se iba ablandando dentro mio hasta que su píja se escurre junto a nuestros néctares, se me ocurrió, le pido me los coma?, no, es una cosa que debe surgir de él, no puedo ser tan depravada. Lo aprieto mucho contra mi, me lo meteria todo dentro mio, escucho: Rosa que lindo ha sido, te quiero mucho. Sabes me gusto deberíamos hacerlo siempre, si ...

... hijo lo haremos siempre, pídemelo cuando tengas ganas. A ver?, me levanta el camisón para mirar mis tetas, que lindas son, me dejas? Las acaricia y mis pezones tienden a reventar, le guio su cabeza y siento como sus labios se apodera de una de ellas, que dicha, bajo mi brazo en busca de su pija como para hacerla reaccionar, pero para mi sorpresa la encuentro dura, caliente y resbalosa. Se la acaricio y le pregunto: quieres de nuevo?, si, claro, subiéndoseme de nuevo. Asi con toda la concha exudando su leche, la mete, ahora si ya parece un maestro cogiendo lo atenazo con mis piernas bien levantadas y siento que me llega a la boca del utero, que placer, cuantas cosas pasan por mi cabeza, empuja entra en el como una vez saliste, destrózame, asi, asi, no pares, solo mis gemidos y los de el se oian, se tiesa todo su cuerpo y me dice Rosa de nuevo me viene, que hermoso es, seguidamente imagina lo que recibi dentro mio, fue suficiente para lograr acompañarlo con mis estertores y gritos de placer, casi al mismo tiempo, este pendejo me hacia y hace todavia acabar mucho mas rapido que cualquier otro macho. Me converti en su maestra, lo hice a mi gusto, cosa casi imposible de lograr en un hombre, es mas, lo conduje a tantos caminos como mis fantasias podrian tener. Todo lo aprendia muy rapido, y lo mas natural para lo que no fue necesaria ninguna orientacion fue mamar mis tetas, claro lo habria tenido como acto natural desde que comenzo a respirar. De a poco lo orienté a hacerlo en todas ...