El día en que salí del closet
Fecha: 15/07/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: brandonloredo, Fuente: CuentoRelatos
Esta historia comienza así, sucede que yo desde que me acuerdo he tenido inclinaciones homosexuales, siendo más joven tuve mi primera experiencia sexual con un primo, el cual se quedó a dormir en casa una noche y precisamente en mi cama, lo que me excito bastante y no pude dormir creo toda la noche, y casi en la madrugada me volteé como dormido y lo abrace de la cintura a lo que mi primo no dijo nada, poco a poco baje mi mano hasta tocar su verga que ya la tenía tiesa, y se la estuve agarrando un rato, luego yo me volteé y él se puso detrás de mí yo le ofrecí mi culo así descaradamente, sintiendo tanta excitación como pocas veces he sentido, él se acomodó bien como cucharita y sentí su verga dura buscar mi culo. No me la metió no sé por qué pero esa fue mi primera experiencia.
Confieso que he tenido lapsos de travestismo, me gusta mucho vestirme de mujer, con vestidos entallados, medias con encaje y ligueros, zapatos altos y usar pelucas cuando estoy solo en casa, luego alcanzo tremendas erecciones y no necesito masturbarme, sino que así solo llego a eyacular, he comprado consoladores y dildos que me meto por el culo, lo cual me gusta mucho, porque siento muy, pero muy rico toda una experiencia sensual.
Y bueno en mi trabajo tengo un compañero que siempre me anda provocando, él es un tipo de unos 50 años, con pelo cano, muy alto como de 1.80, delgado con un bulto bien proporcionado, porque se le marca la cabeza de la verga en el pantalón, y bueno muy seguido me toca ...
... las nalgas, o llega y se me pone detrás y me lo arrima, a veces me toca los pezones y así se la vive provocándome, hasta que una vez en una parranda de la oficina solo quedamos él y yo tomando, como el no traía coche y yo sí, nos fuimos a buscar más cerveza y así anduvimos buena parte de la noche, hasta que nos paramos en un parque solitario.
Él me dijo vamos a orinar? Y yo lo acompañe también a orinar, ambos nos sacamos la verga para orinar e intencionalmente se la mire, la tenía gruesa muy gruesa aunque estaba flácida se veía que erecta estaría muy buena.
Él también me miro la mía, que es pequeña como de unos 15 centímetros nada de que presumir, pero aun así se le quedo viendo y yo a la de él, y regresamos al coche, yo ya me había calentado viéndole su falo grueso y cabezón.
Intente encender el auto para seguir paseando pero la batería se había descargado y como era un bocho la batería estaba atrás bajo el asiento trasero y él se ofreció a checarla, y se estiro por entre los asientos delanteros de tal manera que su pelvis quedo casi en mi cara, y ahí pude percibir ese olor a macho, a semental, casi casi pude oler su semen y como despistadamente acerque mi boca a la cabeza del pene que se notaba sobre sus jeans, el sintió lo que yo hacía y como que se hizo el tonto, y me decía sigue intentando, no sé si se refería a encender el auto o a otra cosa, fu e entonces que no resistí la tentación y se lo agarre, él se dio el sacón, y me dijo que paso? Yo le dije nada no te ...