Carolina y el vigilante
Fecha: 26/06/2017,
Categorías:
Transexuales
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... no lo volteaba a ver por la pena Lo acompañé hasta la puerta y cerré con llave. Soy una tonta, pensé en ese momento, era mi gran oportunidad y la desperdicié. Me pasé la noche triste, pues pensé que después de eso sería más difícil, aunque fue todo lo contrario. Pasaron 3 días y volvía a ser el turno de Don Alejandro, antes de las 10 fui por una botella de tequila y comencé a tomar. Después de 5 caballitos ya había agarrado el valor suficiente, escribíun pequeño recado y fui rápido a la caseta, lo metí debajo de la puerta, toqué y me fui lo más rapido que pude, cuando llegué al departamento pude ver que apenas Don Alejandro salía de la caseta y cómo recogió la nota y cerró la puerta. "Don Alejandro, creo que tengo problemas de nuevo con mi regadera, espero pueda pasar a las 12 en punto a mi departamento, yo no estaré, pero lo hará pasar mi hermana Carolina" Dpto 204 Cuando cerré la puerta del departamento me arrepenti totalmente, qué acababa de hacer, para no dejarlo afuera decidí echarme dos caballitos más, no quería estar totalmente alcoholizada, pero si quería tener el valor para acostarme con aquel hombre maduro. Eran las 11 y yo ya me encontraba bañada y depilada, sólo me hacía falta elegir la ropa adecuada. Tome una de mis tangas de encaje color rosa, una medías negras de red, unos tacones rojos, luego me puse una falda igualmente roja, ajustada y corta, apenas dejaba ver la tanga si me agachaba lo suficiente, y encima un top, y una blusa negra, acompañada de un saco. ...
... Peluca negra y lacia. Me maquilllé con un carmin y unas sombras rojas. Me miré al espejo y no sé si era por el alcohol pero sabía que esa noche iba a tener a ese madurito en mi cama. Eran las 11:55 y moría de miedo, apagué todas las luces y solo deje encendida la del baño. Que alumbraba la entrada y el corredor ligeramente. Estaba justo por asomarme por la ventana cuando escuché que tocaron la puerta, no el timbre. -Buenas noches, pase por favor -Buenas noches señorita, me dijo el joven que de nuevo tuvieron problemas con su regadera Ahora no hablaba con esa voz gruñona, sino con una voz muy sumisa y me encantaba -Sí, sígame por favor Entre penumbras yo me contoneaba como una zorra, y sabía que Don Alejandro me seguía por el ruido de los tacones, para ese momento no me importaba que escucharan los vecinos. Llegamos al baño y pensé que con la luz él se daría cuenta del engaño, pero actuó como si nada y comenzó a aflojar la regadera. Él no hacía nada más que volvera colocarla, ni siquiera me volteaba a ver a pesar de mi mirada directa y coqueta. -Le afrezco algo de tomar? -No gracias muñequita, estoy en servicio, y no puedo tomar alcohol, que es lo que estás tomando verdad? -Este si, tome un poco de tequila -Pero muchas gracias. Por cierto, no sabía que vivías aquí con tu hermano, nunca te había visto. Por dentro sentí que el fuego me subía hasta la cara y se disparaba para todos lados. Ya estaba yo en mi máximo punto de excitación y de atrevimiento. -No, no vivo con mi hermano, ...