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El dilema -2
Fecha: 24/07/2020, Categorías: Gays Autor: orestes santoyo, Fuente: CuentoRelatos
... había penetrado, la enorme herramienta de Adrián hacía estragos en mi madre que nunca había disfrutado nada parecido, la presión y ajuste entre sus partes hacia que la fricción fuera muy intensa lo que provoco en ella orgasmos continuos que la hacían gritar de placer, con un alarido chillido, se derrumbó sobre el sillón, la herramienta de Adrián quedo expuesta brillando de sus jugos, se veía majestuosa dentro de su enormidad, sus venas se apreciaban con claridad a lo largo y ancho de su bello cilindro de carne, lo llame con mis brazos abiertos y antes de permitir que me penetrara la tome entre mis manos y la lleve a mi boca, lamí y chupe en toda su longitud, recogí el sabor de los jugos de mi madre, era miel y no otra cosa, la acción de mi mamada calmo un poco la urgencia de Adrián por penetrarme y correrse dentro de mí, le miraba a sus ojos y cuando sentí que estaba como yo, le solté permitiendo que se acomodara entre mis piernas, subí mis piernas a sus hombros y goce continuamente desde el momento de la penetración, me encontró receptiva e intensa, solo puedo decir que la sensación de sentirme totalmente llena incremento la intensidad de mis espasmos, goce continuamente y sentí con toda claridad como mi útero y vagina se contraían y succionaban el esperma de mis machos donde la herramienta de mi hermano era el colofón a mi lujuria, sentí su semen con clara intensidad y me deje ir con la pasión del momento, bese y mordí su boca, me entregue a mi hermano por completo, sus ...
... movimientos siguieron hasta que me vio desvanecerme dentro de los raptos de mi gozada. Creo no mentir al decir que esa misma tarde quede embarazada y obviamente no lo confirmaríamos hasta casi cuarenta días después, a partir de ese momento, suspendimos el sexo entre todos nosotros, decidimos armar parejas diferentes todos los días, yo prefería de amantes de una noche a mi papa y a mi hermano Adrián, esas tardes noches dábamos rienda suelta a nuestra pasión y lujuria, yo les prefería pues me sentía totalmente llena y plena por los orgasmos con que me regalaban; Iván por su lado, prefería pasar las noches con mi madre y ella me contaba cómo iba evolucionando en su técnica y resistencia para hacerle el amor, Algunos fines de semana, yo esperaba ansiosa la llegada de mis hermanos, prefería a Adrián que no solo era un experto amante, conmigo era súper-tierno y aseguro que una gran pasión se formó entre nosotros, en esas ocasiones empezábamos con un baño de tina donde las caricias y los besos nos calentaban, llegábamos a la cama y en más de una vez nos dimos sexo oral simultáneamente y aunque en momentos me olvidaba de su majestuoso miembro sabíamos que el plato fuerte era la magia de la penetración, ese momento inicial de la penetración lenta, de mi vagina extendiéndose para poder aceptar el ancho de su miembro, paulatinamente la presión de mis paredes internas hasta lograr la profunda llegada a tope con mi útero, pocas veces sentí dolor, Adran me comento que con otras mujeres ...