1. Pasa de todo en esa cabaña del bosque


    Fecha: 08/10/2017, Categorías: Sexo con Maduras Hardcore, Sexo en Grupo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... cogiéndose a Martha, la infiel esposa de Carlos; quien tampoco estaba a la vista.Carlos apareció detrás de él y entre ambos me pidieron si podíamos continuar lo que habíamos iniciado la noche anterior.Los miré a ambos y, sin responder con palabras, dejé deslizar la toalla hasta el suelo. Quedé completamente desnuda frente a estos dos machos alzados y eso fue lo único que ambos necesitaron para entrar a la habitación y cerrar la puerta detrás de ellos.Les advertí que el culo todavía me ardía y me dolía demasiado como para volver a entregarlo. Dijeron que mi concha ardiente sería suficiente…Alberto se inclinó y recogió del suelo unos zapatos rojos de taco alto.Confesó que ese detalle lo excitaba mucho y me pidió que me los calzara antes de comenzar. Me aseguró que así estaría más desnuda todavía…Con una sonrisa en los labios me recosté de espaldas sobre la cama; abrí mis piernas y los miré a ambos, preguntándoles cuál sería el primero…Alberto dijo entonces que le tocaba a Carlos. Este último sonrió y comenzó a desnudarse. Pronto lo tuve entre mis muslos, lamiéndome expertamente mis labios vaginales todavía inflamados por la actividad reciente…En un par de minutos Carlos me arrancó el primer orgasmo matutino, que grité como loca hasta casi quedar afónica. Realmente el tipo sabía cómo chupar una concha hasta convertirla en fuego…Cuando supo que yo había acabado, Carlos se incorporó y me pidió que me pusiera a cuatro patas. Le recordé nuestro trato y me prometió que no ...
    ... intentaría sodomizarme…Enseguida me aferró por las caderas y pronto sentí que su verga dura comenzaba a penetrar poderosamente entre mis labios vaginales, abriéndose paso hasta el final de mi humedecida concha.Comenzó a bombearme muy despacio al principio; pero luego fue acrecentando la cadencia de sus embates, que pronto se convirtieron en profundas penetraciones que me hacían delirar e placer y lujuria…Carlos acabó demasiado pronto, para cederle su lugar a su amigo.Alberto ya estaba desnudo y sobándose su enorme verga; me preguntó si realmente no quería intentar otra vez sentirlo abrirme la cola. Dije que no…Me hizo poner boca arriba y me penetró suavemente, mientras colocaba mis tobillos en sus hombros. Comenzó a bombearme la concha; cada vez con más ímpetu.En pocos segundos llegué al clímax y aullé mi orgasmo como una loca…Verme acabar incentivó bastante a Alberto, ya que, enseguida él tensó su espalda y pude sentir su semen hirviente invadiendo mi vientre..Mientras descansábamos volví a preguntar por mi marido y Alberto estalló en carcajadas, diciendo que seguramente estaría disfrutando del voluptuoso cuerpo de Martha, en esa misma cabaña donde ellos me habían cogido la noche anterior. Carlos asintió con expresión seria y me dijo que yo misma podía ir a comprobar que eso era cierto…Un poco intrigada, me vestí y decidí caminar un poco para verificar eso…Era verdad. Me asomé apenas por la puerta de esa sucia cabaña y pude verificar la escena que aparecía frente a mis ojos.Mi amiga ...