1. Pagué por silencio


    Fecha: 10/10/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Lovarena, Fuente: CuentoRelatos

    ... en la barra comenzaras a quitarte la tanga con mucha discreción hasta tenerla en tu mano, momento en que me sentare como un desconocido a lado tuyo pediré un trago y me la darás en la mano”; comencé a bajar mi tanga por los costados ahí sentada como pellizcándola a través del vestido y poco a poco moverla pero justo el del bar me preguntaba que si esperaba a alguien cuando sentí como nuevamente cobraba vida dentro de mí, no me dejaba hablar bien al grado de que me pregunto el del bar, ”se siente usted bien?”, “si mejor que nunca” le dije pero no había notado que mis pezones empujaban el vestido y el cantinero los veía, acercándome aceitunas de botana y tratando de hacerme la plática, y yo no podía articular muy bien mis palabras de tanto placer que sentía dentro de mí y de pronto dejo de moverse, me recupere un poco y busque en el bar donde podría estar el sentado disfrutando de cogerme a distancia, entonces baje del banco alto para ponerme de pie frente a la barra y poder continuar bajando mis calzones poco a poco discretamente, pero en esa posición de pie y justo con la tanga debajo de mis nalgas no solo sentí sino hasta escuche el zumbido de como nuevamente comenzaba a jugar dentro de mi, solo apreté las nalgas y recargue mis dos brazos en la barra parando las nalgas para darle mayor espectáculo en donde quiera que me estuviera viendo, sentí como mi entre pierna se mojaba y paro de moverse, aproveche para bajar un poco más mis calzones, me senté y fue mucho más fácil el ...
    ... poder llevarlos a las rodillas cuando por tercera o cuarta vez giraba dentro de mí su juguetito esta vez era diferente comenzó muy despacio y lo sentía levemente pero rico sin saber que minuto a minuto subía la intensidad al grado de escucharse salir el sonido de mi vagina, y hacerme apretar más y más para evitar moverme, esta vez me hizo terminar en un silencioso orgasmo y con una sed horrible que termine mi trago de una vez pidiendo otro para aprovechar el momento en que se distraía el del bar bara pasar mi tanga por una pierna y luego la otra hasta tenerla en mi mano, dándome tiempo de muy discretamente limpiar con ella mi entre pierna que escurría de placer y solo la guarde en mi mano.
    
    6:00 después de 45 minutos jugando a cogerme a distancia por fin aparecía a lado mío como un completo desconocido, sentándose en el bar, lo miré y le sonreí, pidió algo de tomar y me miraba sonriendo al momento que ponía sobre la barra un pequeño control remoto que comprendí era el mando de lo que yo tenía dentro de mí en ese momento y yo extendí mi mano para abrirla sobre su mano y entregarle mi tanga húmeda, que inmediatamente se llevó a su nariz y se quedó oliéndola por largo tiempo para después levantarse y saludarme con un lindo beso diciendo “gracias por el momento, te está gustando?” A lo que conteste que SI, que como se le ocurrían tantas cosas me dijo vayamos a otro lugar… pero yo no estaba segura de poder pararme porque ahora seguía su juguete dentro de mí, pero entre lo mojada ...