Viaje de negocios - Relatos Eróticos

Viaje de negocios

... pareja, les salude y me respondieron con una sonrisa como reconociendome. Les pedi entonces si podian cuidar mi mochila mientras iba al agua. Aceptaron de buen gusto y me fui al agua. Me gustaba sentir como me observaban, tanto hombres como mujeres, mi cuerpo en sunga. Iba exhibiendome con orgullo hasta entrar al agua. Lo busque con la mirada, pero no lo encontre. Disfrute del agua de todas formas. Espere que mi pija se bajara antes de salir. No podia dejar de pensar en ese puber que me deseaba. Sali del agua y volvi hasta la sombrilla. Mi sunga mojada se transparentaba un poco y dejaba ver mis atributos de mejor manera. Jovencitas me miraban con descaro pero no respondia a su mirada. Cuando iba llegando al lugar de la familia vi que el ya estaba ahi y me miraba caminar hacia alli. Pero no me miraba a la cara, sino a mi cuerpo. Al llegar, di las gracias a su familia e intente tomar mi mochila. El seguramente no entendia nada. Su madre me invito a dejarla ahi, como invitandome a quedarme alli. Acepte pero de todas formas me sente un poco alejado de su circulo familiar. Al sentarme en la arena salude a los hijos. Ambos me miraban con deseo claramente. Yo pretendia que no me importaba. La madre era una mujer charlatana, me pregunto mi nombre, que hacia alli, en que trabajaba, mi edad. en fin, todo. Me entere que ellos eran de buenos aires, estaban a pocas horas de alli y se quedaban una semana mas de vacaciones alli. Era la unica que hablaba. Yo era simpatico pero sin hablar ...

... demasiado, no queria entrometerme en esa familia, me parecia demasiado sobre todo pensando en las intenciones que tenia con su hijo. Los demas no hablaban. El padre los invito al agua pero solo la madre acepto. Al irse los padres, la hija le dijo a su hermano que iria a encontrarse con amigas, que avisara a sus padres y se fue. Quedamos los dos solos. El no hablaba. Le pregunte su nombre y me dijo que era Fabian. Su voz temblaba, no terminaba de acostumbrarse a su voz de hombre y se mezclaba con la de niño, menos aun con los claros nervios que tenia. Estreche su mano y era suave. Debajo de sus axilas no tenia nada de vellos, totalmente lampiño aun. Senti una electricidad recorrer mi cuerpo como si nos besaramos. Fue un saludo un poco mas largo de lo normal. Yo lo veia a los ojos y sonreia. El no se atrevia a observarme fijamente. Tome de mi mochila el protector y me puse un poco en la cara. El sol estaba fuerte. Luego le pedi, adrede, que me pusiera un poco en la espalda. El dudo unos minutos pero acepto. Mientras sentia su mano en mi espalda mi verga crecia en el poco espacio que mi slip le dejaba. Levante una pierna intentando ocultar el lado de mi cuerpo para el que se inclinaba mi verga erecta. Me puse un poco en el pecho y note que estaban saliendome pelos cortitos nuevamente que no habia tenido tiempo de afeitar. Me gustaba llevar todo el cuerpo afeitado. El lo hacia con delicadeza. A proposito, reparti mal la crema sobre mi pecho y luego le preguntaba a el si no tenia ...