1. Violado por cuatro vecinos


    Fecha: 24/09/2020, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... otros dos por una pierna cada uno y, aunque yo daba patadas, no podía defenderme contra los cuatro. Me arrancaron mi pantaloneta y me resistí fuerte cuando iban a sacarme el jockstraps, entonces el que estaba frente a mí me dio una patada en los huevos y me dolía enormemente y con desesperación. Rompieron las cintas del jockstraps y lo dejaron colgando, rompieron mi camiseta de tirantes y comenzó el que estaba libre, se bajó sus pantalones y calzoncillos a sus tobillos y sin más me clavo su polla en mi culo, me violó y dejó dentro de mí su lefa, sin compasión ni miramientos, ni para noda contó que yo no lo disfrutara; luego sustituyó a otro amarrando mi pierna para que me follara lo mismo, y, aunque intentaba resistirme, me hacían más daño. El tercero en violarme, el tío que nos vio en el río, no solo tenía la polla más gorda, sino que sentí un dolor fortísimo como que me desgarraba y partía el culo y después de soltar su lefa, con la mano apretó fuertemente mis bolas y ya me dejó desarmado, creía morir. El cuarto, porque yo me retorcía de dolor, me dio un puñetazo en mi vientre muy fuerte, tanto que él se quejaba de haberse dañado la mano, pero yo creía que me remataba. Cuando acabaron me soltaron al suelo de golpe y con mi cabeza di en la acera. Como que me faltaba la respiración y no sabía qué estaba pasando pero sentía como si me dieran bofetadas muy fuertes. Se fueron y quedé totalmente aturdido y sin poder moverme.
    
    No sé cómo fue, pero, cuando desperté, me vi ...
    ... rodeado de enfermeras y médicos sin poder hablar, luego me explicaron que habían hecho radiografías de todo, que tenía dos costillas rotas, un corte sangrando en la cabeza, sangre en el ano y muy hinchado el escroto, y varios golpes por la cara; me habían hecho análisis de sangre, pero yo no necesité hablar, ellos vieron que había sido violado. Cuando pude, después de varias horas, pedí que llamaran a Corny. Al rato llegó con sus dos hermanos. Me preguntaron y antes que les pudiera contestar ya estaba la policía, pues los médicos habían dado parte. Respondí a sus preguntas y entendí que sabían de quienes se trataba.
    
    Me repuse, aunque me costó como dos semanas hospitalizado. Los padres de Corny me llevaron a su casa para cuidarme durante la convalecencia. A ellos dos a solas les dije todo, que era gay, que me había enamorado de Corny, que su familia como gustaba. No me dijeron nada, ni me recriminaron ni me insultaron, solo su padre dijo:
    
    — No pienses en nada más que en ponerte bien; si tú y mi hijo os queréis son cosas vuestras, no nos opondremos, el asunto son tus padres.
    
    — Ellos ya lo saben, pero estarán preocupados porque, desde lo que me pasó como me hospitalizaron, no les he llamado.
    
    Al día siguiente estaban mis padres en casa de Corny y fue cuando ayudados por el señor Gustavo, el padre de Corny, buscaron una vivienda amplia y la compraron. Allí vivimos ahora Corny y yo en buena armonía, pero tenemos que ir en domingos alternos a casa de nuestras respectivas ...