Hermanos sin tabu cap 11
Fecha: 02/10/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Crystal69, Fuente: SexoSinTabues
... donde estaba tío Mauricio. Mi corazón latía enormemente ante la premisa de tener sexo con dos hombres más adultos que yo, y los dos dotados con penes gruesos que al final de cuentas era lo que más importaba, y no tanto el largo. Literalmente se me hacía agua la vagina y nada más llegar, los dos hombres se dieron una palmada y se acostaron en la arena uno junto al otro. —Mauricio, más te vale no ser tan duro con mi bebé. —Descuida. —Ay, papi, que tampoco tengo un culito de cristal —me reí y me senté entre ellos. Tomé la verga de cada uno con la mano y comencé a masturbarlos al mismo tiempo. Me olvidé de lo que era el pudor. Además mi pecho latía deprisa ante la idea de tener sexo con mi papá y mi tío, y no sólo eso, sino que lo haría en un sitio público, a la vista de muchas personas. Aunque estábamos en un lugar algo apartado, los playeros me veían y yo les podía ver a ellos. Imaginé que debería de gustarles la imagen de una muchachita como yo jugando con dos penes a la vez. —Veamos… ¿a quién me comeré primero? Antes de poder hacer algo más, papá tiró de mí. Me subí a horcajadas sobre él y miré a mi tío con una divertida sonrisa. —Ups. Te ganaron. —Carajo. —Pero disfruta del espectáculo. Acto seguido tomé a papá de las mejillas y le di un sensual beso con lengua. Él era un hombre maduro y si me olvidaba que yo era su hijita, el sexo se volvía un poco aburrido. Para que fuera excitante debía tener muy presente que él era mi padre, el hombre que me había cuidado desde niña. ...
... Eso alimentó el morbo e hizo que le besara con más intensidad mientras él me apretaba las nalgas con ambas manos. En seguida bajé a besos por su pecho y me di la vuelta, de tal forma que mi culo quedó justo sobre su boca y mis labios a la altura de su pene. Papá no perdió tiempo en separar mi coño con sus dedos y hundir su lengua entre ellos. Estaba mojada y segura de que mis jugos le estaban humedeciendo toda la boca. Yo tomé su verga entre mis deditos y primero le di un beso al glande. Acto seguido me lo metí a la boca con suavidad, disfrutando de cada centímetro que se me enterraba en la garganta. Mi tío miraba la escena asombrado y con una sonrisa mientras se acariciaba la verga. Le guiñé un ojo y continué con lo mío. Me separé cuando gemí porque papá tiró de mis labios vaginales con sus dientes. Se sentía tan bien cuando su barba raspaba contra mi clítoris. Además mi mamada estaba acaparando la mirada de varias personas, mujeres y hombres por igual, que disfrutaban del show como si fuera una película porno en vivo. Me dio un poco de pena seguir con lo mío, pero era más mi deseo de ser cogida por estos dos hombres que no me interesó tener público. Tío se levantó y se colocó a mi lado. Yo me incorporé con las piernas flexionadas para no ahogar a papá con mi culo, y después tomé el pene de Mauricio y me lo llevé a la boca con una mamada rápida. Podía ver en la distancia que algunas mujeres también mamaban las vergas de sus esposos. Estaba despertando el deseo de las otras ...