Mis recuerdos
Fecha: 23/10/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... hacer el mate. «Vero, vos sos casada?», me dijo ayudándome a acomodar la compra. «Sí», dije solamente. «Que suerte tiene tú marido con una mujer como vos», me dijo, «una mujer como yo?, que tengo de especial?», le dije sacando la pava del fuego y me tomé el primer mate. «Sos muy hermosa, me gustas mucho», me dijo agarrando mi mano cuando le di el mate. «Facu, que soy casada», le dije soltando mi mano de la suya. «Me gustas Vero», me dijo dejando el mate sobre la mesa y me abraza por la cintura, «pero que haces loco», le dije tratando de evitar que me bese, aunque realmente lo hice por disimular. «No Facu, no seas malo», le dije dejando que me bese. Fue un beso suave, sobre mis labios, nos miramos, sin decirnos nada nos abrazamos, nos besamos, nuestras lenguas se buscaron. Facuando me acariciaba, sentía mucha pasión en sus besos, en sus caricias, siento sus manos en mi espalda desabrochando mi corpiño. «Vas muy rápido», le dije cuando me empezó a chupar una de mis tetas. Yo sentí como una descarga eléctrica, solo atine a acariciar su cabeza y a gemir mientras Facundo me chupaba y me lambia los pezones. Sus manos empezaron a bajar mis pantalones junto con mis bombachas. «Vamos a mi dormitorio», le dije dejando que me chupe las tetas y me acaricie las nalgas. Fuimos dándonos besos, me tiré sobre la cama, deje que Facu me termine de desnudar, empecé a gritar de placer cuando Facundo ...
... empezó a chupar mi concha. «Sí Facu, sí, así Facu, me matas», le decía retorciendo mi cuerpo de placer sintiendo como Facu me lambia el clítoris, me abría bien las piernas y me daba fuertes chupadas en la concha. Facundo se acomodó entre mis piernas, las tenía bien abiertas, empecé a gemir, casi daba gritos de placer cuando sentí como Facundo me la empezó a meter, «sí, toda, metela toda», le pedia disfrutando de como me estaba cogiendo. No podía dejar de temblar, disfrutando de como Facu me estaba cogiendo. Sentía su pija entrar y salir de mi concha. «Facundo, Facu, me acabo, llename bien la concha, dame toda tú leche», empecé a gritar de placer, teniendo un orgasmo tan fuerte que creí que me desmayaba, no se cuanto hacía, años que no gozaba tanto, y sentir como Facundo me empezó a llenar mi concha con su leche, caliente, sus quejidos de placer dejando toda su leche dentro mío. Nos quedamos acostados los dos un rato, tratando de tranquilizarnos. Nos dimos nuestros números de celular y quedamos para que vuelva otro día. Cuando Facu se fue, yo seguía con su leche dentro, hice un boyo con mi bombacha y la puse entre mis piernas, fui desnuda hasta la puerta para despedirlo, me sentía tan bien desnuda delante de él, ese beso de despedida que me dio, no quería que se vaya, pero podía tener problemas si mi marido lo encontraba en casa. Quedamos que lo iba a llamar yo para que venga a visitarme.