Chantaje (VII): Un paso a lo prohibido
Fecha: 25/10/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: TKBDDOS, Fuente: CuentoRelatos
... cuerpo como spandex casi, y como era de esperar, me puse el vestido y me tuve que quitar el brasier ya que al ser strapless se veían las cintas por arriba, de esa parte me quedo muy bien, pero mi problema fue abajo por tener mis nalgas grandes, el vestido me apretaba mucho de la parte de abajo y estaba muy cortito que si me agachaba tantito se me vería todo. Escogí unas zapatillas negras que me quedaron a la perfección, y me vi en un espejo grande que había, me vi muy guapa aunque el vestidito era muy corto, se me lucían mis piernas y eso me gusto. Guarde mis cosas en el locker y fui con el gerente.
Camine de regreso por el pasillo y no había nadie, dije: ya termine de vestirme, pero no hubo respuesta, vi los productos en el piso y me acerque a recogerlos, pero no sabía cómo agacharme sin que se me levantara el vestido. Pensé de frente no, me agachare doblando las rodillas con las piernas juntas y de ladito, es la forma más simple de hacerlo. Me agache la primera vez, recogí los primeros productos y sentí que el vestido se me subió un poquito, me agache la segunda vez, recogí los últimos productos y sentí que el vestido se me subió un poquito más, ya sentía que enseñaba la parte baja de mis nalgas, se me veía todo eso claramente, me levante y súbitamente oí la voz del gerente que venía caminando por otro pasillo: Guauuu, está usted guapísima y el vestido le quedo perfecto, entre mi dije: perfectamente chiquito. Yo estaba parada con los productos en las manos así que no ...
... acerté a bajarme el vestido, el al ver como estaba, se apresuró a sentarse en su escritorio como si le fueran a ganar el lugar en un concurso. Abrió los ojos como desorbitados y se puso rojo, ahí me di cuenta que ya me había visto la parte baja de mi colita apenas cubierta por el mini vestido, me apresure a poner los productos sobre el escritorio y rápidamente con las dos manos me lo baje lo más que pude, que la verdad no fue mucho pero si me cubrí.
Después de un rato de silencio y de que el tragara saliva, me dijo: disculpe me puse un poco nervioso ante impresionante belleza, puede pasar a la despachadora de gasolina número uno, esa es en la que trabajara usted, no se preocupe por que la molesten los muchachos yo ya avise que usted trabajaba conmigo y nadie la molestara, cualquier cosa los reporta conmigo, descolgó el teléfono y llamo a un trabajador, no sabía quién era, pero cuando llego y por el uniforme que llevaba deduje que era el chofer, el gerente le pidió que me llevara a la gasolinera que ya había indicaciones precisas.
El chofer un hombre de unos 50 años me ayudo con aquellos productos y nos dirigimos al estacionamiento, al llegar a la gasolinera me dirigí hacia la bomba despachadora, entre las miradas lascivas de los trabajadores pero por suerte ninguno se atrevió a dirigirme la palabra, lo único que dirigían eran unas miradas tratando de ver algo más. Ahí estuve hablándole a la gente que llegaba a la gasolinera, algunos se detenían solo para verme de pies a ...