Los grandes pechos de mi prima Ainoa
Fecha: 26/10/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: El Boishon, Fuente: CuentoRelatos
... y palpé sus duras nalgas y las acaricié durante un rato, después acerqué un dedo a su ano y jugué con la pelusilla que crecía su oscuro agujero, y en ese momento ella volvió a darse la vuelta, quedando frente a mí. Tremendamente asustado porque casi se queda mi mano debajo de su culo con lo que se abría despertado, dejé pasar algunos minutos más mientras trataba de relajarme. Luego tendí mi mano hacia sus pechos y en cuanto la toqué se volvió a girar quedando bocarriba nuevamente.
Esta vez necesitaba más y abrí los botones superiores de su camisa de pijama, y metí la mano hasta encontrar una de sus tetas, fui acariciándola hasta que llegué a un pequeño bultito que identifiqué como el pezón. Lo cogí entre los dedos y jugué con él, y este respondió endureciéndose por momentos. Seguí amasando su pecho y pellizcando levemente el pezón cuando ella después de un ligero gemido, abrió los ojos y me descubrió con una mano bajo su pijama y la otra agarrándome el falo. Volvió a cerrar los ojos haciéndose la dormida y se dio la vuelta, pero esta vez se tapó hasta arriba con la sábana. Yo me quedé muy preocupado por lo que ella podría pensar, pero para sorpresa mía al día siguiente seguía siendo igual de amistosa conmigo como siempre.
El día siguiente transcurrió sin nada remarcable, hasta que por la noche me propuso volver a salir de marcha. Esa noche ella bebió considerablemente más que la noche anterior, pero yo hice lo contrario: me abstuve. Al volver a casa ella me dijo lo ...
... mismo que el día anterior, pero después dijo que no le apetecía nada sacar la cama auxiliar y tener que hacerla, así que me dijo que durmiese en su cama. La cama era individual por lo que había que apretarse bien para no caerse. Ella me dijo que la abrazase, y yo rápidamente la cogí por la cintura pegándome a ella. Al sentir el contacto de su cuerpo me empecé a empalmar y fui clavándole la polla en el culo, pero ella no se movía.
Con la cadera empujé un poco hacia ella, pero ella no reaccionó, así que supuse que se habría dormido. Lentamente subí mi mano por su abdomen hasta llegar a sus pechos, puse la mano sobre uno de ellos y lo empecé a amasar, lo agarraba y lo apretaba cada vez más fuertemente sin pensar en que ella se podía despertar en cualquier momento. Mientras con la mano que me quedaba libre le movía la pasaba la polla por sus nalgas, recorría la raja del culo con ella y metía mi dedo levemente en su ano por encima del pijama. De pronto pensé que era muy raro que con lo que le estaba haciendo no se despertase y supuse que las copas que se había tomado le habían producido un profundísimo sueño. Así que con esta idea dejé sus tetas y bajé la mano hasta su entrepierna, acaricié sus muslos y finalmente comencé a frotar su coño por encima de la tela. En esto ella me apartó las manos y se incorporó diciendo:
-Puedo permitir que me toques las tetas y el culo pensando que estoy dormida, pero si me empiezas a violar ya hablamos de términos mayores, así que esta noche deja ...