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La Soledad de los LLanos (Capitulo 4)
Fecha: 01/11/2020, Categorías: Infidelidad Autor: Carlos Nagasaki, Fuente: CuentoRelatos
... mientras Villarreal no se percataba de dicho sentimiento. De manera déspota el contrabandista le habló al joven. - ¡hey tú... nuevo!... échale una mano a los potosinos, ¡no te hagas guey!- -sí señor... ahí voy- *** Los potosinos eran un grupo de personas originarias de San Luis Potosí que esperaban la oportunidad de cruzar a Estados Unidos. Mientras trabajaban para Villarreal. Durante varias semanasChachoconvivió con ellos. Se dio cuenta de la infinidad de atrocidades que sufrían a manos del rico hacendado. Eran constantemente humillados y trabajaban por más de 16 horas diarias, sin goce de sueldo. Siempre les recordaba que“El” sería quien los cruzaría a los Estados Unidos por lo que le debían obediencia. En una fogata nocturna los potosinos contaron varias historias de sus vidas. Los sacrificios que habían hecho para llegar a la frontera. La manera en que eran tratados y discriminados. Las historias desgarradoras conmovieron a Luis al punto de la reflexión profunda. Sin embargo, algo peor se aproximaba. La gota que derramó el vaso sobre la escasa calidad humana de Adolfo Villarreal fue la siguiente; Una mañana llegaron Merced González y Florentino Hernández -Pistoleros de Villarreal- Levantaron a todo el mundo de sus camas y los interrogaron.La Hacienda El Arenal–propiedad de Villarreal- había sido robada. Losguaruras[6] en vez de encontrar al infractor buscaban a quien castigar. Ante el alboroto pusieron a los trabajadores en fila. González y Hernández ...
... escogieron a un joven oaxaqueño de entre todos. -¡haber tu¡...¿Quién robo en la hacienda?-cuestionaba autoritariamente Merced González. - no se señor, de verdad que no se- contestó intimidado el trabajador. - mira cabrón, a mí me dijeron que llevara a alguien, así que si no nos dices quien fue.... te llevamos a ti, yo no voy a andar batallando- explicó Florentino Hernández. - está bien, está bien, nomás denme unas 3 horas para averiguar quien fue y yo mismo se los traigo- respondió en su delirio el trabajador. - no…. ¡una hora!… te damos una hora para que lo encuentres- enfatizó Merced González. El joven oaxaqueño buscó, preguntó e indagó todo lo que pudo. Al ver que no podía encontrar al culpable se dio a la fuga. Ese mismo día los gatilleros lo mataron junto a un arroyo. Su cuerpo lo encontró el mismo Luis junto con otros dos trabajadores. Nadie reclamó su cuerpo.(+) *** El muchacho había visto suficiente. Ahora no solo era el sentimiento de vengar a su padre. El clamor de justicia por las salvajadas ocurridas en el Rancho lo impulsaban a accionar. <<tengo solo un mes aquí y ya he presenciado un asesinato ¿cuantos más habrán sucedido antes?>> sopesó el joven afligido. Sabía que tendría que actuar con mucha cautela. Don Adolfo Villarreal era un hombre muy peligroso y difícil llegar. Estaba completamente resguardado por más de 10 hombres, entre ellos su escolta personal conformada por Merced González y Florentino Hernández. Era muy probable el fracaso en ...