Mari Carmen, una madre muy ardiente. 2
Fecha: 02/11/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: hagen2012, Fuente: SexoSinTabues
... su culo indefenso y follado, no puede contenerse y se corre también, derramando sus jugos calientes de nuevo, en medio de ahogados gemidos de placer. -¡Ooooohhhh!- gime Mari Carmen, corriéndose, sintiéndose totalmente follada -¡Aaaahhh! -¡Siiii…ahhh…ahhh…me…corroooo…mamaaa…ahhh!!- exclama, con la voz susurrante, Pablo, mientras su miembro viril, endurecido y vibrante, lanza chorros y más chorros de semen sobre el culo de su follada madre. Al fin, el orgasmo termina, para los dos. Extenuado, Pablo se retira, y admira la belleza de la desnudez total y obscena de su madre, de espalda a él, tirada de cualquier forma sobre la mesa de la cocina, desnuda, abierta de piernas, mostrándole sin pudor alguno tanto su coño enrojecido y mojado como su agujero anal, que muestra a las claras las señales de su reciente sodomización. Y que decir del culo de su madre, casi cubierto por completo por abundantes riachuelos de chorreante semen que se desliza hacia abajo, hacia sus muslos potentes… Mari Carmen se recupera un poco, se deja caer al suelo y se da la vuelta. Contempla la polla de su hijo, grande aún después de correrse. Y la amorosa madre se arrastra por el suelo y llega hasta Pablo. Se yergue un poco, le coge la polla con la boca y empieza a lamérsela, hasta dejarla limpia por completo. -Mmmmhhh…Pablo…- susurra, sacándose la polla de la boca- Tienes una polla maravillosa y…¿sabes que tu padre nunca me ha dado por el culo?- Pablo siente que las fuerzas empiezan a regresar a su miembro ...
... al oir las palabras de su madre. -Si- continúa ésta- Mi culo es…era, virgen, hasta esta tarde, hasta que tú…oh…¡Dios, que estoy diciendo!- Mari Carmen se levanta, horrorizada al escuchar sus propias palabras. La excitación ha disminuido mucho en su cuerpo y ahora, la vergüenza y el oprobio dominan su corazón. -¡No!¡Debo irme…estoy desnuda…sin ropa que ponerme…Pili…si Pili nos ve…no!- y busca enfebrecida los restos de sus destrozadas prendas. Los encuentra, agarra con vehemencia las bragas hechas jirones, su vestido hecho trizas, y se dirige a la puerta de la cocina, no sin antes mirar a los ojos a su hijo Pablo. -Pablo…esto no puede repetirse más…no debemos…hacerlo más…nos podrían descubrir…¡ y además, está mal, soy tu madre y una madre no debe…no debe…follar con su hijo! Yo…me voy…me voy a mi alcoba a vestirme y luego, volveré, para hacer la cena…no me sigas…ahora no, Pablito, por favor…yo… Los ojos de Mari Carmen se llenan de lágrimas de vergüenza. No puede soportar la mirada de su hijo. Y escapa, desnuda, por el pasillo, hacia su habitación, ahogando los sollozos que acuden a sus ojos y a su boca. Pablo, con una creciente excitación, la ve marcharse, y no puede evitar fijar su mirada en el magnífico culo desnudo de su madre, que se bambolea sensualmente a un lado y a otro, como incitándole a una nueva aventura incestuosa. Al fin, oye el portazo de la habitación de sus padres. Pablo, entonces, se viste sin prisa, casi deseando que Pili baje y lo sorprenda desnudo y con la ...