Alicia 08/25
Fecha: 08/11/2020,
Categorías:
Intercambios
Autor: evloguer, Fuente: SexoSinTabues
... eternidad, miré el reloj con aprehensión y riendo me dijo que ese día entraría tarde, que una maestra avisó que faltaría en el 1er. turno. Sus palabras solamente sirvieron para que volviésemos a nuestra danza macabra, al entrechocar todo para sentirnos de diferentes maneras, éramos realmente una pareja de novios viviendo los tiempos felices. Le besaba toda la carita mientras mis dedos jugaban con su pelo y su mano apretaba allí abajo, quería sentir todo ese cuerpito con mis labios, le besé cada pulgada de carnecita hasta llegar a esa zona donde todo se precipita, donde todo se diluye. Por encima de la bombachita mordisqueaba ese tajito, esa pequeña protuberancia que se estaba convirtiendo en monte. Tuve que frenar sus manitas que ya estaban por bajar la prenda, quería disfrutarla así un ratito más, quería besar esos bordes donde la tela se confunde con la piel, quería pasar las manos bajo su colita y levantarla para meterme en la boca todo eso. La estaba llevando al paroxismo sin lamer su ranurita aún, por lo que separaba el borde un poquito nomas para meter la lengua por allí, como jugando pero sin llegar al final, hasta que ya no aguanté sacándole la prenda yo mismo. Estaba ante mi vista la puerta al cielo, una vertical hendidura con algo de humedad, tal vez mezcla de mi saliva con juguitos propios. No me alcanzaba la boca para devorar todo eso, y un dedito travieso medía el tamaño de la virginal entrada, creo que esta nueva inserción la enloquecía y sus manos pasaron de ...
... mis hombros a tomarme los cabellos, me agarraba como las crines de un caballo produciendo sensaciones entre el placer y el dolor. El invasor dactilar no pudo avanzar mucho, había una telita que se lo impedía, el guardián de la puerta sagrada. No quise profanar aquel templo, era la separación entre un virginal ángel y un simple angelito. Pero el dedo seguía allí haciendo suaves movimientos, esta vez el pulgar jugaba en la otra entradita, acaparaba todas las humedades de la zona para llevarlas al ojito cerrado. Mientras hacía estas maniobras aceleraba los movimientos de lengua hallando nuevos puntos de placer, creo que la emoción del momento aflojó ciertos músculos ya que me encontraba con parte del pulgar entrando donde solamente quería golpear las puertas, estaba a un paso de hacerle un candadito, no podía creer que era mi Alicia quien temblaba bajo todo aquello. La presión había subido demasiado y la caldera no pudo más que explotar, todo su cuerpito convulsionaba y su garganta emitía sonidos extraños, era un hermoso orgasmo que mi chiquita estaba disfrutando sin inhibiciones, se estaba desarmando entre mis brazos. Luego de un segundito para recuperar la respiración normal ya se disponía a bajar la cabeza para proporcionarme el desahogo necesario, le parecía natural luego de la sesión de ayer. Pero yo quería oler esos cabellos, quería su carita a disposición, quería morder esas orejitas desde atrás, entendió con presteza y se dió vuelta ofreciéndome su colita. Aun tenía el ...