Desvirgando a Javi-V: Noche de orgía- 2a parte
Fecha: 14/11/2020,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: almogaver92, Fuente: RelatosEróticos
... que quiera con la mujer para poner celoso al marido hasta que este acepte que no controla nada de nada.
-Pues vamos a visitarles
Andamos desnudos hacia las cuadras. La hierba parecía una moqueta a nuestros pies descalzos. Al llegar ahí, 21 apretó un interruptor y la luz de los fluorescentes bañó la estancia. En cada esquina había un esclavo, en una un hombre y en la otra una mujer. Los dos estaban desnudos, ni siquiera tenían collares, solamente estaban atados por una cadena del tobillo a la pared.
Eran un matrimonio bastante joven, los dos tendrían alrededor de 35 años y me miraban desconcertados, tapándose los ojos con los brazos para protegerse de la luz.
Me acerqué a la mujer, y sin darle tiempo a decir nada, le puse mi miembro delante de la boca.
-Chúpamela bien -le dije mientras mi polla se ponía morcillona. La mujer no se lo pensó demasiado y se la puso entera a la boca. No estar aún empalmado hacia que la sensación fuese muy distinta, pero no por eso menos placentera. Mientras me acababa de excitar y poner a tono, miré al marido. Estaba mirándonos, con una expresión que mezclaba la resignación y la rabia, pero a pesar de ello, el ver a su mujer mamándosela a alguien, le hizo reaccionar y poco a poco, su pene empezó a crecer y endurecerse. Se me ocurrió una idea.
-Haz venir a 49 -le dije a 21. La esclava se marchó corriendo hacia la casa. Aparté la cabeza de la mujer de mi miembro, ahora ya totalmente empalmado.
-Ponte a cuatro patas -le ...
... ordené. Parecía un poco reacia a cumplir mi petición, y me entró la duda. Podía obligarla? Era una esclava? Carmen la tenía atada y durmiendo como un animal en una cuadra. Me la jugué.
-Es que quieres que vaya a por la fusta o el látigo? -le pregunté intentando sonar amenazador y seguro.
-No señor -dijo ella mientras se ponía con el culo en pompa. Me arrodillé detrás suyo y puse mi glande a la entrada de su vagina. Ésta no estaba mojada, y hasta ahora tanto la de Cristina como la de Carmen lo habían estado. Le pegué unos lametones a la vulva, y cuando parecía estar un poco lubricado, empecé a metersela.
-Ohhh... -joder que bien sentaba, que calentito se estaba dentro de esa mujer. Ella no hizo el menor ruido, y se quedó quieta aguantando mis lentas embestidas.
Justo cuando empezaba a marcar un poco de ritmo, llegaron 21 y 49. Me quedé quieto con la polla dentro de la vagina de aquella mujer, sintiéndola caliente y húmeda alrededor de mi aprisionado miembro.
-Ves aquél hombre? -Le dije a 49. El marido cornudo estaba ya totalmente empalmado.
-Si señor -contestó el esclavo.
-Pues vas a satisfacerle sexualmente, harás todo lo que te pida sin rechistar, entendido?
-Si señor.
-Si te quiere dar por el culo, te dejas, si quiere que se la chupes, se lo haces, entendido?
-Por supuesto señor -dijo totalmente sumiso el esclavo.
-Ya lo has oído -le dije al hombre. -Desahógate con él, mientras sigo follándome a tu esposa -le dije mirándolo a los ojos mientras ...