1. Luis, Jacobo y un verano 07 Jacobo y yo somos instruidos - 08 Trío con mis primos


    Fecha: 18/11/2020, Categorías: Gays Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues

    ... la cama y mi primo sobre mí. Jadeábamos como si no hubiera aire en la habitación y nuestros corazones quisieran salir de nuestros pechos, estábamos sudorosos, exhaustos y muertos. Tardamos unos minutos en recuperarnos, su verga se había salido de mi culo y cayó a mi costado, agarró mi mano y nos miramos respirando aún con dificultad. -¿Te ha gustado mariquita? Ha sido un servicio especial para ti. –sonreía como todo un brujo encantador, con su cara roja, húmeda del sudor y pasando la lengua por sus labios. Se lo confirmé con un gesto de la cabeza. -Sí, puto. Ha sido un servicio muy rico. –sonreíamos los dos mirándonos a los ojos, realmente había estado soberbio e increíblemente bello, había conseguido que tuviera dos orgasmos sin correrme, o al menos como me corro otras veces, el semen que había tirado resultó muy poco. Disfrutando de nosotros habíamos olvidado a Bruno que permanecía a mi otro costado y no veía, me di cuenta cuando pasó su brazo por mi cintura has llegar con su mano a tocar el cuerpo de Jacobo. -Todo ha resultado muy bonito pero, ¿para mí no hay algo? -comenzó a tocar las nalgas de Jacobo, éste las contrajo cerrándolas. Si Bruno se la metía le iba a doler, me di la vuelta y le encontré elevado y apoyado sobre su codo, su verga se había reducido mientras Jacobo me follaba. -Aun no me he corrido puedes usar mi culo para ver si lo haces mejor que él. –la sonrisa le apareció y me plantó un beso en la boca. -Lo haré, pero déjale a él que me la ponga dura. -no ...
    ... tuvo que pedírselo directamente, me aparté un poco para que su cuerpo cupiera entre nosotros y se lanzó directamente a la boca de su hermano, montándose sobre él. Mientras se besaban cogí la polla de Bruno y comencé a acariciarla, a sacudirla masturbándola, luego la metí en mi boca saboreando su glande que se había hinchado, lleno de sangre, rojo y brillante. Sus besos se volvían más sonoros mientras mi primo se excitaba nuevamente endureciéndosele el pene, el pellejo de su escroto estaba ahora relajado, casi transparente dejando ver sus huevos, sus pelitos casi no se notaban, acaricié su pellejo moviendo las bolas de un lugar a otro y volví a meter su babeante glande en mi boca enroscando mi lengua en él. Había aprendido a mamar las vergas, me gustaba como si fuera esa mi vocación, sabía tratarlas como se merecían cosas tan delicadas y sensibles y empezaba a ser un prodigio, ellos me lo aseguraban y también Julio. Mi primo empezó a moverse, excitado como estaba quería llegar al orgasmo, entonces dejé su pene para lamerle los huevos y meterlos en mi boca, con suma delicadeza para no dañarlos los envolvía en mi saliva llevándolos con mi lengua hasta el paladar, tiraba de ellos teniendo cuidado aflojando mis labios para, en el último momento, soltarlos y que salieran como un tapón. Me había vuelto a excitar y con una mano acariciaba mi polla manteniendo la rigidez, Jacobo besaba y lamía a su hermano por todo el pecho prendido de sus tetillas minúsculas, estábamos dando a Bruno una ...