MI SUEGRA TERMINO FOLLANDO CONMIGO - Relatos Eróticos

MI SUEGRA TERMINO FOLLANDO CONMIGO

... solos ella se quitó el tres cuarto lo colgó en el armario, de nuevo con el vestido, su cara era sería pero la mia era igual, no sentía ahora ningun placer sentia si deseo pero a la vez me sentía sucio, mala persona, me quité la cazadora la colgué tambien, pusé el aire acondicionado, ella entró en el baño cerró la puerta, quedé solo, escuchando correr el agua, quedé sin camisa sin camiseta, empezaba a actuar el aire acondicionado, la coloqué en el armario, ella tardó en salir, cuando salió, iba en medias negra transparente braguitas negras de encaje bastante pequeñas y un corsé que a su vez llevaba ligas cogida a las medias. Ahora entré yo en el baño, cerrando la puerta, ella se habia lavado en el bidet, yo hice lo propio, no me duché, tampoco, solo me lavé la polla, ahora ya no estaba dura, ni mi cerebro excitado, salí de nuevo con los boxer negros solo, ella estaba sobre la cama sin taparse la tele encendida sin apenas voz, me miró, no habiamos dicho nada de nada desde la conversación, en el coche nada de nada, quedé de pie mi polla a un lado, miré sus tetas, prietas abundantes en el escote del corsé generosísimo, ella estiró el brazo acarició casi sin ganas mi vientre, eso me hizo moverme y me tumbé a su lado, mi mano pasó a su espalda tocando el corsé pero rapidamente bajo hasta una de sus nalgas, ella apagó la luz, eso en parte me hundió queria verla ver que haciamos, pero fui incapaz de decir nada, ella tenia su mano en mi espalda, apenas acariciaba, parecía como si ...

... dijera, tocame ya follame y vamonos. Mi mano en su nalga, acariciaba pero sin ningún efecto por su parte, me pegué más hasta sentir sus tetas en mi pecho escuchaba su respiración su cara a un lado de mi, mi mano empezó a apretar su nalga mas que acariciarla, escuché un levisimo gemido, seguí igual acariciando y apretando esa nalga la unica que tenia a mano en esa postura, a la vez sentia sus tetas en mi pecho, grandes duras como se hundian, en mi, mi mano cada vez apretaba mas fuerte su nalga, asi en esa semioscuridad, solo con la luz de la calle que entraba por la ventana, callado los dos, empecé a "entonarme" a calentarme, escuchando los leves jadeos de ella cuando le apretaba fuerte la nalga, así fue subiendo la temperatura, lentamente, hasta que ya casi me asfixiaba y me decidí decidí ahora si excitado lanzarme a lo que me habia contado el comercial, a probar aquello, la aparté de mi, me puse de rodillas y la terminé de tumbar quedando ella boca abajo, yo detras de rodilla miré sus nalgas desnudas apenas las braguitas se metía por la raja de su culo, puse las dos manos sobre ellas, una en cada nalga, grande, mis manos no las cubria ni por asomo, apreté las dos como si amasara pan, ella gimoteó de nuevo, ahora mas claramente, levanté una mano, la derecha y la dejé caer con cierta fuerza en su nalga ella al instante gimoteo de nuevo, todo eran solo sonidos y sombras de nuevo levanté la mano estaba vez le di mas firmemente ella gimió, aún más, al instante, volví a repetir en la ...