La sobrina de mi esposo (IV) - Relatos Eróticos

La sobrina de mi esposo (IV)

... rosando el interior de mis piernas y haciéndome abrirlas un poco para facilitarle sus caricias.

Natalia no daba crédito en ese momento a lo que veía, yo estaba dispuesta a que nos vieran y empezar nuestra noche de sexo delante de ellos a ver si se animaban a compartir con nosotros, no sé si hacer un intercambio pero si deseaba ver a Natalia con la verga de su marido entre sus labios o penetrada, ella estaba muy excitada pero incomoda se notaba no sabía si seguir mirando cómo nos acariciábamos con mi esposo o quitarle las manos a Alex que parecía un pulpo acariciándola en su abdomen en sus piernas y en sus pechos, ella se notaba que se sentía muy ansiosa viendo como nos besábamos con mi esposo, el me acariciaba de manera descarada en presencia de ellos, ya mi esposo aparentaba que le importaba poco que estuvieran mirando comenzaba a besarme el cuello mientras descaradamente frotaba mis senos y los sacaba del sujetador, yo miraba a Natalia incrementando mis gemidos incitándola a que se dejara seducir por el momento, ella me miraba suplicante para que detuviera la escena mientras la mano de mi esposo sensualmente bajaba a frotarme el clítoris, -ummm como estas de mojada bebe, se nota que te excita que te manosee delante de ellos me decía mi esposo mientras se chupaba los dedos, – tu esposa esta así de mojada Alex? Natalia se puso muy colorada viendo como su esposo sin preguntarle bajo la mano frotándole el clítoris mientras se le escapaba un gemido, – uff que delicia nunca ...

... te había sentido así de mojada amor, comenzando a frotarle el clítoris al tiempo que le chupa sus pezones haciendo que Natalia ya se entregara a lo que estaba pasando y viéndome sacarle el miembro a mi esposo, me acomode en cuatro sobre el sofá frotándoselo mientras me lo iba metiendo en la boca sin quitarle la mirada a Natalia, veía como se empezaba a morder los labios y su esposo se arrodillaba delante de ella para comenzar a lamerle la cuca dejándole el espacio libre para ver lo rico que se la mamaba a mi esposo.

Era un momento muy delicioso ver y oír a Natalia gemir desinhibida, una mujer que hasta ese momento siempre había sido muy puesta en su lugar, que a pesar de sus atributos tan deliciosos nunca se viste insinuante, y verla allí abierta de piernas mientras su esposo le hace un cunnilingus es muy excitante, es el momento de hacerle sacar la puta que llevamos dentro todas y nos da miedo dejarla aflorar por lo que piense nuestra pareja; Me baje del sofá terminando de desvestir a mi esposo cogiendo de la mano y acercándonos a ellos hice sentar a mi esposo al lado de Natalia que no decía nada pero no se movía mientras seguía su esposo lamiéndola delicioso, me metí entre sus piernas reanudando la mamada metiéndome su verga hasta la mitad y volviendo a sacarla lamiéndole sus huevas mientras frotaba su verga, miraba a mi esposo que no se perdía detalle de Natalia gimiendo, ella intento quitar a su esposo mientras empezaba a convulsionar pero Alex se aferró a sus piernas ...