1. Perdida de mi virginidad


    Fecha: 02/03/2021, Categorías: Jóvenes Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Me llamo Marina, soy una chica rubia, ojos verdes, de 19 años, 1,70 m de altura, y un muy lindo cuerpo. Lo que cuento sucedió hace tres años, cuando contaba 16.
    
    Karla llegó al colegio de una escuela del interior, ella es una linda morena un año mayor que yo. Su preparación no era muy buena y todos se burlaban con frecuencia de ella, así que sentí lastima y empecé a ayudarla. En el colegio me preguntaban que hacía con la campesina, y eso me molestó mucho y me unió más a ella. Estudiabamos juntas y hablabamos mucho. Me contó de sus experiencias sexuales y eso me excitó mucho. Quería saber más y ella me contaba. Una noche la invité a dormir en mi casa, había una tormenta electrica y Karla tocó mi puerta, al abrirle me contó de su miedo y me pidió que durmieramos juntas, por supuesto accedí. Allí en la cama Karla me abrazó, el contacto me agradó mucho, Karla empezó a pasar su pierna por mi pubis y eso me calentó. De repente me preguntó que con qué frecuencia me masturbaba. Nunca, respondí, entonces volvió a preguntarme, ¿Nunca has tenido un orgasmo? No, contesté, entonces Karla me dijo: Déjame regalarte uno. Estás loca, respondí y ella rió y me dijo: No tengas miedo, va a ser algo maravilloso, cierra los ojos y déjame lo demás a mi. No estaba muy convencida, pero si muy excitada y acepté. Al cerrar los ojos sentí como los labios de Karla se pegaban a los míos y empezó a besarme con ternura, mientras una de sus manos acariciaba uno de mis senos. Aquello era delicioso y no pude ...
    ... reprimir un suave gemido de placer. Guaoo, dijo, estás ardiendo y empezó a quitarme el pijama, besó mis pezones y sentí que me extremecía de placer, sin apuro me fue tocando toda, acariciando cada parte de mi piel, desde la cabeza a los dedos de mis pies, los cuales chupó tan divinamente que creí que moriría de placer. Luego subió por mis muslos y posó su boca en mi clítorix y empezó a disfrutarlo con su lengua, labios, y dedos. Sentía que iba a explotar y cuando estaba a punto, se detenía y me dejaba delirando. Eso lo hizo varias veces hasta que por fin introdujo uno de sus dedos en mi vagina mientras me lamía los genitales, y entonces exploté en la más rica y estimulante sensación que había tenido en mi vida.
    
    Quedé temblando de placer, mi cuerpo se extremecía de gozo, y perdí la noción del tiempo y el espacio. Karla tapaba mi boca para que mis gritos de placer no despertaran a mis padres. Cuando al fin me recuperé estaba temblando de placer, y karla me dijo: Ahora ya sabes como satisfacer a una mujer, quiero que me des un orgasmo. Esa noche aprendí como le gustaba ser acariciada a Karla, y vi fascinada como mis dedos entraban en su vagina y ano.
    
    Después de ese día nos veíamos con mucha frecuencia, Karla quería meterme más de un dedo, pero yo era virgen. Un fin de semana mis padres saldrían por 4 días de viaje y le dije a Karla. Ella vino a casa para estar conmigo. Después de darme un delicioso primer orgasmo bajó por algo de tomar, al volver me tapó los ojos y me dijo ...
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