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La esclava del año (Cap. 3)
Fecha: 02/04/2021, Categorías: Gays Autor: ALTEZA, Fuente: CuentoRelatos
Ya de regreso en casa de su Amo; Mara empezó a cumplir con todas las tareas impuestas, la primer orden de la lista era entrar a 4 patas, orden que Mara decidió no cumplir creyendo que su Amo al no estar presente no se enteraría si su esclava entraba o no a 4 patas, sin embargo el Amo ideó una manera para darse cuenta si su nueva perra obedecía todas y cada una de sus órdenes. El punto número dos era barrer y trapear toda la casa, cuarto por cuarto, rincón por rincón. A Mara se le hizo fácil ir por la escoba y barrer de pie y solo estar en 4 patas cuando estuviera su Amo presente, sin embargo su dueño se le había adelanto sabiendo lo mañosa que era su nueva esclava, por lo que echó a la basura el jalador solo dejando la jerga, así como también rompió en varios pedazos el palo de escoba dejando solo el cepillo, lo que obligaba a Mara a tener que barrer y trapear a cuatro patas lo quisiera o no. El siguiente punto era limpiar y dejar brillando los baños, pero cada escusado debía ser limpiado solo con la lengua, y más le valía a Mara no usar productos de limpieza, ya que si recuerdan, esos eran los sitios permitidos para ella beber agua, así que no se arriesgó a usar químicos y evitar que al beber agua pudiera intoxicarse y enfermar. Cada punto de la lista tuvo que ser cumplido al pie de la letra en tiempo y forma, llegó el tiempo de recoger al Amo de la oficina. Cuando llegó la perra a recoger a su Amo, al ver que venía a lo lejos, le cargó nuevamente el portafolio, le ...
... abrió la puerta para cerrársela una vez que su dueño estuviera dentro del coche. Le fue ordenado dirigirse hacia una clínica veterinaria y comprar ahí el alimento canino, el despachador y el collar que quedara justo a la medida de su perra, y así recordara a quien pertenecía y el motivo por el cual terminó siendo perra, después de ahí se dirigieron al sex shop para comprar su uniforme de esclava. Al llegar a casa la esclava abrió una vez más la puerta para que bajara del auto su Amo y señor, después se puso a cuatro patas para entrar a casa tal y como debía hacerlo según las ordenes de su señor, pero justo al adoptar esa pose, su Amo le dio semejante patada en la cola que le dejo marcada la forma del zapato y sin más le dijo a su perra, “ese castigo fue por no entrar a cuatro patas en la mañana como te lo ordené. Una vez más la esclava no pudo evitar preguntarse cómo es que su Amo se daba cuenta de lo que no cumplía en su ausencia, pero como tenía prohibido hablar, no quiso arriesgarse a recibir otro castigo igual o peor. Inmediatamente después de haber recibido semejante recordatorio que esté presente el Amo o no ella tiene que obedecer y cumplir las órdenes, se le indicó vestir su nuevo uniforme de perra y que bajara de la cajuela del auto el pesado costal de croquetas de perro si es que deseaba comer después de cumplir sus obligaciones. El Amo ordenó a su perra servirle de comer y mientras el disfrutaba sus alimentos, la esclava debía permanecer lamiendo y besando ...