1. Los tios del equipo de Rugby (II)


    Fecha: 06/04/2021, Categorías: Gays Autor: trujillano_hot, Fuente: SexoSinTabues

    ... bici a hacer deporte: “a sudar la camiseta”, como le gustaba decir. Teníamos muchísima confianza y desde pequeño estaba ensimismado con su figura. Me quería un montón y siempre me intentaba proteger o se preocupaba cuando algo no iba bien. Descubrió que me gustaban los tios cuando me pilló en la sauna de nuestra urbanización con un vecino 11 años mayor que yo con el que quedaba para jugar al tenis. Después de cada partido, nos metíamos en la sauna y le comía la polla hasta que se corría en mi boca. El tío tenía novia, pero era adicto al sexo oral. Aquel día mi padre alucinó conmigo. Me tuvo una semana y media encerrado en casa, dándome la chapa, hablándome de sexo y explicándome que lo que tenía que buscar era alguien de mi edad que me comprendiera y me diera cariño. Lo que menos le importaba era que fuera gay, pero que chupara pollas de tios mayores le producía una impotencia y angustia que no era capaz de soportar. Desde entonces, la relación se había estrechado, haciéndose más cercana, sobreprotectora y cariñosa. Sé que estaba orgulloso de mí, pero no quería que me dedicara a distraerme con tíos adultos. Quería que su hijo fuera licenciado universitario a toda costa, y hacía un enorme esfuerzo para que no me faltara de nada. Su ojito derecho, vamos. Después de la padre había quedado medio convencido. Había tragado con la mentira de que estaba con Lucas, mi mejor amigo desde el colegio. Él era el típico tío responsable hetero que lo sabía todo de mí y que me quería tal y ...
    ... como era, jamás me había cuestionado. El amigo que todo el mundo quiere tener. No era especialmente guapo, pero era muy masculino, y desde pequeño sentía una enorme atracción por él. El plan era que tenía que llamarle y pedirle que si mis padres le preguntaban algo, me tapara diciendo que estaba en la universidad estudiando. -Lucas, tengo que pedirte algo- Le dije un poco impaciente. -Qué pasa, nene, ¿Estás bien?- me contestó. -Si, todo perfecto. Solo que estoy metido en un marrón. Mis padres piensan que estoy estudiando contigo en la Uni para un examen la semana que viene y en realidad estoy con unos amigos de fiesta- le expliqué con poca convicción. -¡No me jodas! ¿Con quién estás?- me preguntó con un tono entre serio y curioso. -Ahora no, Lucas, te prometo que te lo explico esta tarde o mañana, pero porfa, házme ese favor. -Ehhhh- dudó un momento. Bien tio, yo te tapo, pero no quiero que te pase nada, ¿entendido? Espero que no estés metido en ningún lío y o te pasa algo, me avises inmediatamente y voy a recogerte- dijo con voz más que seria. -No te preocupes, Lucas, estoy bien. Te llamo en cuanto tenga un rato y te cuento- puse fin a la conversación. Solucionado el problema de mi familia y de mi mejor amigo, me quedaba enterarme de qué coño pasaba en esa casa. Había pensado quedarme hasta el medio día, y volverme a mi casa y esperar allí a que mis padres volvieran de casa de mi abuela. Estaba todo pensado y las cosas iban saliendo a la perfección. Ya eran casi las 11, así ...
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