1. Mis cuentos inmorales. (Entrega 24)


    Fecha: 01/11/2017, Categorías: Incesto Autor: Febarsal, Fuente: CuentoRelatos

    Me subyuga tanto el mundo femenino, que ahora mismo daría mi vida y todo lo que tengo por volver a nacer, pero siendo mujer.
    
    El caso es que no soy homosexual masculino, ya que la hembra me fascina físicamente, y feo está que lo diga, pero lo digo sin presunción que he besado centenares de labios femeninos; he libado de los pechos de mil hembras, y he lamido y penetrado decenas de culos y coños. (De mujer, se entiende) De tíos ninguno.
    
    Soy... Bueno, he sido un hombre muy atractivo. Con 20 años: 1.80 metros. 80 kilos de peso, y una cabellera morena ondulada que era (y sigue siendo) la envidia de los calvos. Hoy sexagenario, soy un abuelete guapete, con 15 kilos de más, con "el muelle flojo"; y con "más esencias" femeninas que masculinas.
    
    Sí, en mi cerebro vive una hembra que me atormenta, ya que no puedo gritar al mundo que soy mujer, puesto que sería un mamarracho, una cosa grotesca, el hazme reír de mi entorno social.
    
    En mis delirios, me siento doncella, muy femenina, alta, rubia de ojos verdes y de medidas; 90.60.90. Vamos, lo que se dice una modelo.
    
    Pero no sueño sólo con hombres, no, sueño con otras mujeres, o sea, que soy bisexual, tirando a lesbiana, ya que cuando veo a una enamorada que es abrazada y besada por su enamorado, de verdad "que me mojo". Lo que siente en ese momento el hombre, me lo sé de sobra; pero lo que siente la mujer, debe de ser algo tan maravilloso y excelso, que mi mente no es capaz de descubrirlo.
    
    Y lo que me lleva a los ...
    ... suplicios mentales más escalofriantes, es cuando la mujer, rendida a los manejos de su hombre; por la vulva "escurriendo" sus deseos de ser amada.
    
    Ese abrirse de piernas hasta que no dan más de si... Ese coño expectante y delirante...
    
    El sentir los 80 o 90 kilos del macho cubriéndola...
    
    Y concebir como entran por su vagina esos 20 cm, de miembro viril buscando sus entrañas...
    
    ¡Joder! me vuelven loco. ¡Qué gusto os debe de dar... jodias!
    
    ¡De acuerdo! Al hombre también le da mucho placer tener su polla metida hasta el fondo de una vagina, Pero no hay nada más que observar las reacciones de los dos en el enajenación del orgasmo, como la mujer gime, grita, llora, araña, muerde y al final solloza ante tanto placer recibido.
    
    ¡Y los ritos diarios de poneros guapas...! Eso me lleva a la desesperación; sobre todo el de ponerse el sujetador y las bragas. A veces en mi intimidad, me pongo un sostén y unas bragas de mi mujer, me miro al espejo... Y me dan ganas de devolver; pero cuando me pongo ese vestido tan bonito, y veo que no me cabe por el pecho, pero se me escurre por el culo y los muslos... Lo que me dan, son ganas de suicidarme.
    
    Ahora voy a narrar algunos de mis sueños de lesbiana. Ya sabéis que soy una hembra preciosa y muy femenina, ¡eso sí! Busco en mis quimeras la feminidad más absoluta. Tengo 20 años y suspiro por estar con una chica algo mayor que yo.
    
    Entro en el chat de lesbianas, y escribo:
    
    -Lesbiana de 20 años, muy guapa y femenina, desea relación con ...
«123»