1. Follando a la guarra facilona de mi exnovia Agatha


    Fecha: 20/04/2021, Categorías: Sexo con Maduras Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos

    ... libidinosa.
    
    Yo la desnudé hasta dejarla sola con un corsé negro, unas finas medias con liguero, un libidinoso tanga negro que junto a sus lascivos "taconazos" que elevaban sus tetas y culo, aparentaba ser una lujuriosa fulana de burdel.
    
    La guarra de Agatha, lamía, lengüeteaba y mordía mi procaz tanga y yo tenía un brutal empalme por el libidinoso calentón que Agatha me produjo y disfrutaba del trabajo lingual que esta golfa lujuriosa de Adriana me producía. Lamía y mordía mi procaz y depravado tanga sexy de semental impúdico. Me bajó el tanga y comprobó que ya estaba preparado para "empitonarla" duro donde ella deseara.
    
    —¡estoy muy cachondo, guarra! —berreé.
    
    Agatha se sentó en el butacón de mimbre que tenía su amiga Susana en la habitación y yo marché hacía ella. La furcia de Agatha abrió su libidinosa boca y a continuación me bajó la tela del tanga y tragó toda de golpe mi enhiesta, pero dura verga.
    
    —¡ogh!, ¡agh!, ¡ogh!
    
    Tragó tanto que casi vomita, pero empezó a lamer como una real y genuina prostituta profesional.
    
    —¡uhm!, ¡slurp!, ¡slurp!, ¡slap!, ¡slap!, ¡chok!, ¡uhm!
    
    Yo empujaba lentamente mi culo y encasquetaba pequeños empellones a la boca de la fulana Agatha que tragaba y mamaba mi afeitado rabo con pasión y deleite carnal.
    
    —¡uff!, ¡uff!, ¡agh! —gemía con lascivo vicio Agatha— ¡eres un hijo puta, me encanta comerte el rabo! —añadió con vicio Agatha.
    
    Me quitó definitivamente el procaz y depravado tanga, me llevó a la cama y me tendí para ...
    ... que ella prosiguiera provocándome placer y gozo con su boca de lujuriosa fulana libertina y rijosa.
    
    Su caliente boca de golfa libertina y rijosa bajaba y subía lentamente de mi rabo y yo gemía, berreaba, rugía y me desgañitaba como un semental lascivo mientras jadeaba:
    
    —¡me pones muy cachondo cuando me haces esto, puta! —bramé.
    
    La muy puta de Agatha ponía los ojos en blanco mientras devoraba con pasión y fascinación mi rabo y tragaba mi polla como si nunca la hubiera mamado antes.
    
    —¡así, guarra!, ¡qué gustoo! ¡así, puta!, ¡ah!, ¡ah!, ¡ah!, ¡uhm! —jadeé mientras la observaba con pasmo y vicio.
    
    Agatha proseguía su obscena y relajante mamada como una loba en celo y berreaba y ululaba a la vez que devoraba mi rabo con vicio, acerqué mi mano lentamente a mis duros cojones cargados de lefa y le extraje mi ensalivado rabo de su boca de fulana libertina para que lo lamiera con la punta de la lengua.
    
    Se lo volví a encajar en sus libidinosos belfos de promiscua meretriz y se complacía al devorar con lujuria mi verga de macho. Sacaba y volvía a meter mi rabo en su efervescente bocaza de ramera libertina y succionaba mis maravillosamente afeitados cojones.
    
    —¡que rico, cabrón!, ¡cómo me gusta tragar tu rabo, hijo puta! —gimió la zorra Agatha.
    
    Salimos de la cama y me llevó a un bonito tresillo de mimbre de su amiga Susana y allí me tendí con las piernas abiertas, mientras Agatha, permanecía a mi lado y me agarraba una pierna y proseguía en una interminable y constante ...