1. Vacaciones de verano


    Fecha: 23/05/2021, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... placer y me mira desde el suelo, nos cruzamos las miradas, mientras Belén empieza a gritar anunciando su orgasmo.
    
    Aumento mis embestidas aún más y acabamos casi a la vez. Juan mientras tanto sigue dándole caña a mi mujer, la cual gime cada vez más alto, se ponen sus ojos en blanco y sé que se está corriendo. Juan la penetra cada vez con más furia y en ese momento Belén se acerca a su marido y le clava un dedo en el culo. - Así le gusta más ¿sabes? -me dice- Yo no respondo, solo veo como mi mujer está siendo poseída por otro hombre. Cuando Juan acaba mi mujer le vuelve a chupar la polla en señal de agradecimiento. Estamos todos tumbados en las toallas cuando María y Begoña se acercan: - Bueno, qué, nos vamos -Dice María-. No puedo creer la naturalidad con la que han estado contemplando la escena sin decir ni hacer nada. Después de darnos un baño y relajarnos un poco nos vamos al hotel.
    
    CUARTO DIA
    
    Después de haber visto como mi mujer era follada por otro hombre y se lo montaba con una mujer casi que todo me daba igual. Además yo había mantenido mi primera relación homo con Juan. No me importó lo más mínimo que según llegamos a la playa Luisa se desnudara delante de Juan y éste la besara en la boca y la metiera mano por todos lados.
    
    Mi obsesión ahora era follarme a María y Begoña, en aquella desenfrenada situación ellas no participaban. Yo no sabía como conseguir que ellas entraran en el juego. Mientras, Luisa ya estaba a cuatro patas y Juan la estaba follando, ...
    ... desde luego se habían dado prisa. Además Belén estaba muy ocupada chupándole las tetas a Luisa mientras que con una mano se masturbaba y con la otra le tocaba el clítoris a mi mujer. Mire hacia donde estaban sentadas María y Begoña, me acerqué y lo comprendí todo, claro que no participaban estaban muy ocupadas. Cada una de ellas tenía un consolador con el cual estaban jugando entre sus piernas. Cuando llegue a su lado ni se inmutaron, María estaba jugando con el consolador en su clítoris mientras que Begoña lo tenia dentro de su coñito y lo movía en un lento mete y saca. Me quedé delante de ellas, sin saber que hacer.
    
    María se incorporó un poco y agarro mi polla con su mano, luego acercó su boca y se la introdujo entera, ver a aquella preciosidad chupándomela era más de lo que podía soportar y llené su boca con mi abundante leche en unos minutos. Ella no se la tragó simplemente soltó mi polla y le dio un beso a su hermana, la cual recibió mi leche de boca de María. Aquella situación hizo que mi polla, pese a la reciente corrida, estuviera otra vez a punto. Miré hacia donde estaba Luisa y vi como seguía a cuatro patas recibiendo la polla de Juan y comiéndose el coño de Belén. Mientras María y Begoña seguían jugando con mi leche en sus bocas y estaban tocándose mutuamente, María, levantó los ojos y me dijo: - Creí que nunca íbamos a participar, menos mal que te has decidido. Solo hay un inconveniente, ni mi hermana ni yo follamos, puedes hacer lo que quieras menos follarnos. ...