1. Vacaciones de verano


    Fecha: 23/05/2021, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... Nuestros coñitos lo reservamos para nuestros novios.
    
    Vaya par de putas que estaban hechas las dos niñas. Yo pensando que se mantenían a un margen de toda esta movida y resulta que eran las más putas de todos. Decidí que en vista de que no podía follármelas les daría por el culo a las dos, puse a María a cuatro patas y empecé a meterle un dedo, luego dos, la lubriqué bien con sus propios jugos y empecé a clavársela, sin duda no era la primera vez. Begoña se tumbó delante de ella abriendo sus piernas y dejando su coño a la altura de la cara de María. Esta empezó a comérselo. Aquella visión hizo que mi polla se pusiera aún más dura y se la clavé entera, soltó un grito mezcla de dolor y placer.
    
    Empecé a bombear y bombeé cada vez más fuerte. Debimos estar así varios minutos, mientas Begoña me miraba a los ojos y no paraba de decirme: - No acabes dentro de ella, que yo también quiero mi ración. No pude aguantar y decidí llenar el culo de María de leche, cuando me corrí sentí como me vaciaba dentro de ella y vi como mi leche salía de su culito una vez que lentamente fui retirando mi polla. Begoña se levantó y con su lengua empezó a recoger toda la leche del culo de su hermana. Después de acabar de limpiarla me dio un beso y saboreé por primera vez mi propio semen. Mientras la estaba besando notó como María empezaba a jugar con mi ya flácida polla y me dijo: - Vamos, que Begoña necesita su ración Begoña acompañó a María y entre las dos me chuparon la polla, los huevos, el ...
    ... culo, todo. Mi polla no tardó en reaccionar y tuve una nueva erección. Ahora no tuve que hacer nada, fue la propia Begoña la que se puso a cuatro y María la que se encargó de lubricar y dirigir mi polla a su culito.
    
    Aquello era maravilloso. Este culito me costó un poco más que el de María, luego me contaron que había desvirgado analmente a Begoña, entonces entendí los gritos de dolor que dio durante la penetración y la dedicación que María le dedicó a su coñito mientras yo la enculaba. Mientras la enculaba miraba como mi mujer ahora estaba montando un lésbico con Belén, mientras que Juan tumbado a su lado jugaba con los agujeros de mi mujer. No tardé en llenarla con mi caliente leche, no sé cuánto tiempo estuvimos, ni tampoco recuerdo cuantos orgasmos tuvieron ellas, pero desde luego fue inolvidable mi primera relación con las dos hermanas. Por la tarde nos dedicamos a recuperarnos de nuestras fuerzas y por la noche durante la cena comentamos que el día siguiente lo mejor sería pasarlo en el hotel.
    
    QUINTO DIA
    
    Después de desayunar quedamos en la habitación de Juan y Belén, primero llegamos nosotros dos y estuvimos comentando con ellos lo sucedido durante estos días. Yo les pregunté que si también ellos se lo montaban con sus hijas y Juan nos dijo que solo sexo oral y alguna vez había enculado a María, pero que jamás las había follado por el coñito, eso sí, con Belén mantenían frecuentes encuentros lésbicos. Aquello aclaraba las cosas, según íbamos hablando nos fuimos ...