Las confesiones de Jorgito (6)
Fecha: 26/05/2021,
Categorías:
No Consentido
Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos
... que en el baño tengo una crema que te va a hacer bien.
-Sí, señor Manuel… qué lástima, porque la verdad es que me hubiera gustado que siguieran usándome… -dije con expresión dolorida mientras íbamos camino al baño.
-¡Jajajajajajajajajaja!... –río él y dijo: -¡Qué puto sos, Jorgito! ¡qué puto sos!
-Sí… -acepté poniéndome colorado. –Y cada vez más… casi no puedo pensar en otra cosa…
El señor Manuel volvió a reír y una vez en el baño me hizo poner en cuatro patas y me aplicó la crema.
-¿A qué hora se van a trabajar tus papis?
-A eso de las nueve, señor Manuel…
-Bueno, entonces vas a volver después de esa hora para que te puedas llevar la crema, te limpiás bien el culito y te hacés otra aplicación. ¿Entendiste?
-Sí, señor Manuel. Lo que usted diga…
-Tenés carita triste, nene, ¿qué te pasa?
Bajé la cabeza y admití: -Es que me da… mucha pena no poder volver a… -y corté la frase, avergonzado.
Él me tomó la cara entre sus manos, emitió una risita, me besó en los labios y dijo: -Nada de eso, nene putito… No podemos volver a darte por el culo, pero sí vamos a usarte ese lindo hociquito que tenés… Y ahora vamos a ver si los amigos están en forma otra vez…
Y si lo estaban. Cuando volvimos al living un señor petiso y algo gordo se adelantó hacia nosotros: -Bueno, señor, ¿está el chico en condiciones de que volvamos a cogerlo?
-Sí, estimado, pero solamente por la boca, porque de tanta pija que le hicimos tragar el culito le arde y lo tiene un poco ...
... irritado.
.Ay, pero qué pena… Pero bueno, no estará mal hacerte tomar la mamadera.
-¡Señores!... ¡Vamos por la segunda vuelta! –anunció el señor Manuel y llamó al señor Enrique para contarle lo ocurrido con mi culo.
-Ay, nene, cuidate, ponete algo ahí… -dijo con tono compasivo y entonces le conté lo de la crema.
-Ah, perfecto; aplicátela varias veces al día y espero que muy pronto ese lindo culito esté otra vez en condiciones de alimentarse…
Le agradecí sus buenos deseos y el señor Manuel les contó a todos, el incidente y que entonces deberían limitarse a usarme por la boca.
Para mi alegría no hubo reproches ni lamentaciones sino todo lo contrario: solamente expresiones de entusiasmo y un señor alto y robusto, de cabello canoso, urgió a comenzar la acción.
El señor Manuel dispuso que esta vez no me usarían en la cama. Apartó las sillas y quedó en el centro del living un espacio considerable en el que hizo formar en círculo a todos los señores, incluido el señor Enrique.
-Vos, nene, te arrodillás en el medio y vas de rodillas de un señor al siguiente… Así les vas chupando la pija a todos… Y una cosa importante: no pierdas tiempo en tragar cada leche; con el semen de la verga que chupaste te vas a la siguiente, ¿entendiste?
¡Ay, qué morbo me dio eso! ¡chupar y chupar con cada vez más leche en la boca!
-¡Sí, señor Manuel!... ¡entendí!... –contesté sin disimular mi entusiasmo.
Él rio, me dio una palmada en la cola y me mandó a meterme en el círculo. ...