1. Nada que ver con lo que me habían dicho


    Fecha: 07/06/2021, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... para facilitar que me la meta, me deja caer saliva en el ano, siento como pasaba su polla por mi ojete, yo estaba nerviosa, la cabeza de su polla pasaba para arriba y para abajo, "métela, por favor métela de una vez", le dije, sin dejar de abrir mis nalgas y siento como acomoda su polla contra mi ojete, yo respiré hondo y me relaje para sentir como me iba a romper el culo, quería sentir lo que mis amigas me habían dicho, que se sentía centímetro a centímetro de la polla entrando en el culo, como se abría el ojete, pero mi marido, una vez que acomodó su polla contra mi ojete, me cogió de la cintura y de una sola vez me la metió toda, haciendo que de un grito de dolor, que hasta nuestra hijita se despierte. Le pedía que pare, que la saque, que me mataba con el dolor, pero él nada, me había no roto el culo, me lo había reventado, me había reventado el ojete. Yo lloraba de dolor mientras él metía y sacaba su polla de mi culo, yo sentía tan tremendo dolor, que hasta me había mareado, solté mis nalgas e intentaba sacármelo de encima, pero mi marido seguía follando mi culo con tal brutalidad, que sentía unas ganas tremendas de ir al baño, sentía que me cagaba. Le gritaba que me la saque, que me estaba haciendo mucho daño, pero no paró hasta que se corrió dentro de mi culo. No se como definir el dolor que tenía, como me punzaba el ano, no me podía mover del dolor, "ya está, ahí tienes tu culo roto como querías", me dijo, y se dio vuelta y se durmió, dejándome con un dolor tan ...
    ... tremendo que no podía dormir. Estuve como dos o tres días que me costaba caminar del dolor en el ano, y mas de una semana para que me deje de doler. Cuando iba al baño, era un suplicio. De la rabia, la impotencia que tenía, me sentía violada por él, aunque había sido yo la que le pidió que me rompa el culo, nunca pensé que lo iba a hacer de esa forma tan salvaje, le empecé a meter los cuernos de la forma que yo mejor sabía hacer, chupando pollas. Salía con la escusa de ir a hacer compras y nunca volvía sin haber chupado dos o tres pollas distintas. El sexo con mi marido se había acabado por completo, hasta que llegó un momento que decidimos divorciarnos. Yo hacía mi vida de soltera, salía de paseo y siempre encontraba a algún amigo con quien pasar el rato. Como al año, conocí a mi segundo marido, aunque nunca nos casamos, nos fuimos a vivir juntos. Yo tendría unos 40 años y él andaba por los 60. La relación con él era muy buena, nos llevábamos muy bien en la cama, varias veces me pidió que me deje follar el culo, pero yo tenía mucho miedo por lo que me había pasado con mi primera y única experiencia, hasta que un día le dije que si, que me dejaba follar el culo. Empezaron los juegos íntimos, nos empezamos a calentar, él me empezó a chupar el coño, a pasar su dedo por mi ojete, hasta que llegó el momento que me la meta, yo estaba muy nerviosa, tenía miedo de volver a sufrir lo que me había echo sufrir mi ex, pero no, fue completamente distinto, me la metía despacio, con mucho ...