1. El adolescente novio de mi hija.


    Fecha: 17/06/2021, Categorías: Hetero Autor: dany.la, Fuente: SexoSinTabues

    ... mientras yo me recostaba en el sofá. Me chupó el sexo con una pasión que nunca había puesto mi marido, abriéndome los labios con su lengua y recorriendo toda la zona desde el ano hasta el clítoris, tomándolo en su boca y lamiéndolo hasta que me hizo llegar al orgasmo en medio de grandes gemidos. Luego de esta primera sesión, me tomó del brazo y me llevó hasta mi cuarto completamente desnuda, allí lentamente le quité la ropa, me apoyó la mano en su miembro y me preguntó: -¿Le parece que es grande?. Yo, sin voz, le contesté que si con la cabeza, al tiempo que cerraba mi mano en torno a su miembro. Roberto, se acomodó en la cama y me atrajo hacia él empujándome la cabeza hacia su miembro al tiempo que susurraba; - Chúpemela. Yo me fui acercando lentamente, guiada por la mano de él en mi nuca y abrí la boca al acercarme a su verga. Me introduje la cabeza poco a poco, y realmente como dijo mi hija, era enorme y tuve que abrir bien la boca para que entrara. Sentí como si una brasa caliente me quemara la boca y me dediqué a darle la mejor mamada que él hubiera recibido; empecé a succionar esa cabeza mientras mi lengua la recorría, el placer era enorme, mi cabeza estallaba en mil pedazos, traté de introducirme esa vergota hasta la garganta, pero era muy grande y solamente entró hasta la mitad, por lo que empecé a mover la cabeza hacía arriba y hacía abajo apretando mis labios alrededor de ella lo que le produjo a Roberto gemidos de placer. Al poco tiempo sentí que se iba a ...
    ... venir, yo no sabía que hacer y la saqué de mi boca, pero él me dijo: - Siga, hágalo acabar y va a ver que rico es. Ante lo cual yo me volví a meter en la boca esa tremenda verga, dura y palpitante, y moví mi cabeza hacia arriba y hacia abajo, metiéndola y sacándola de mi boca, lamiendo la cabeza con mi lengua y sintiendo que se ponía más y más dura, para lograr, al cabo de poco más de un minuto, que Roberto se arqueara y se viniera dentro de mi boca, llegándome hasta la garganta con su leche. Al mismo tiempo que esa cálida corriente se derramaba en mi boca, me decía: -¡comaselos. comaselos! ante lo cual yo tragué su semen. Luego de un pequeño descanso inicié de nuevo mis caricias hasta ponerlo a punto y ante su gran excitación me tomó por los hombros, me recostó al borde de la cama, tomó mis piernas y las subió a sus hombros quedando al descubierto mi sexo palpitante que recibió lo que había estado esperando con ansiedad esa enorme Verga de aquel adolescente, separé los labios vaginales y su glande entró, empujando la verga, que deliciosa sensación, al fin había clavado completamente a mi vagina, la saco y la volvio a sumergir en mi raja y comenzo a cogerme muy rapidamente y tal era su grosor y tamaño que me llenó totalmente. Sus movimientos rítmicos de mete y saca se acompasaron rápidamente a los de mis caderas que se movían en círculos alrededor de su verga, perdiendo la noción del tiempo. Sintiendo y escuchando esos huevos chocar en mis nalgas, se coloco encima y me siguio ...