Nuria. Me cogió en el aeropuerto - Relatos Eróticos

Nuria. Me cogió en el aeropuerto

... atorado el orgasmo) movía con rapidez y fuerza los dedos de la mano derecha en el clítoris, sus pulseras hacían mucho ruido con el movimiento pero había que apurar su orgasmo; hizo una mueca con los dientes apretados como queriendo ayudar así a apurar el orgasmo, su mano izquierda apretaba fuertemente mi hombro derecho enterrándome las uñas, finalmente se desencadenó su orgasmo provocándole fuertes jadeos que por momentos querían ser gemidos ahogados, la atraje hacia mí apretando sus nalgas nuevamente, instintivamente ella quería cerrar las piernas por lo que apretaba sus piernas contra mis muslos y caderas y con su mano derecha apretaba su vulva, paso su brazo izquierdo la parte superior de mi espalda y me abrazó con fuerza enterrándome nuevamente las uñas, al mismo tiempo, hundía su cara en el cuello de mi camisa para disminuir el ruido de sus gemidos y de esa forma dejar salir plenamente su venida, nos quedamos un momento así y luego nos besamos y abrazamos durante unos minutos, entre el calor, la adrenalina y la cogida los dos ya sudábamos copiosamente, se levantó y descolgó su calzoncito del gancho en el que lo había puesto y se lo puso, cortó una buena cantidad de papel, lo enrollo y lo colocó en su entrepierna por dentro de la pequeña braguita que termino de subir y acomodar, posteriormente se bajó el sostén para cubrir nuevamente sus tetas, las acomodo en el sujetador (como le dicen en España) y luego procedió a abotonarse rápidamente el vestido, yo me arregle la ...

... ropa y quede listo, se acomodó el cabello y nuevamente nos besamos, notó mi expresión de vergüenza y me dijo que no me preocupara que había quedado muy bien, que las prisas y el lugar no ayudaban, que estaba muy contenta y pues sí, reía de oreja a oreja. Revisamos que no se nos olvidara nada y salimos del cubículo, dos hombres estaban en los lavabos, interrumpieron lo que hacían cuando nos vieron por reflejo del espejo, salimos rápidamente y las mesas del restaurante ya tenía mas gente, una de las mesas relativamente mas próxima a los baños y que era ocupada por unas mujeres mayores, notaron que salíamos del baño de hombres, se rieron y empezaron a comentar entre ellas divertidas, de otras mesas solamente se nos quedaron viendo, Nuria no se dio cuenta, mantuvo la vista al frente mientras tomados de la mano nos apresuramos a la puerta de abordaje de su vuelo, llegamos 4:05 todavía no empezaban a abordar, su prima ya estaba impaciente, se relajó al vernos y un tanto impaciente le dijo en catalán, “ya es tarde y no llegas, ¿y ya viste como traes de arrugado el vestido?, ¿y eso, qué son esas manchas?” (Nuria me lo tradujo después), señalando con el dedo a la parte media del vestido a la altura de su pubis, resulta que cuando ella tomó mi pene con su mano y empezó a masturbarme provocó que me saliera mucho fluido lubricante que en la refriega terminó embarrándose en el vestido, dejándole una buena cantidad de manchas aún un tanto húmedas, no nos dimos cuenta cuando estábamos en el ...