1. No hay nada mejor que atrapar a un hijo con el culo


    Fecha: 03/07/2021, Categorías: Anal Autor: tranque, Fuente: CuentoRelatos

    ... supositorios, más rápidos, más localizados y bla bla bla, no lo pude convencer, hasta parecía enojado cuando lo contradecía.
    
    —No te va a quedar otra que usarlos si te querés curar.
    
    —¿Qué me vas a obligar? Jajaja
    
    —Si es necesario, te voy a obligar.
    
    —¿Quién, vos? Jajajaja, toma estos son los supositorios, primero me tenés que atrapar.
    
    No podía haber salido mejor, otra vez el anzuelo, esta vez fueron dos blíster de supositorios de glicerina sobre la mesa, ninguna inscripción le regalaría una pista de su contenido, ni creo que si la tuviese se hubiera leído. Así como se las tiro en la mesa le doy la espalda y me voy caminando esperando su reacción, que no tardó en llegar, escucho que corre la silla arrastrándola con violencia, me doy cuenta que me quiere agarrar y salgo corriendo. Me corre por toda la casa, él como el cazador y yo su presa, me trata de tomar por la cintura, pero me resisto con violencia y escapo, sabía que por puro instinto eso lo violentaría más. Me agarra dos veces y logro escapar nuevamente, ya en el segundo intento me sujeta más fuerte. Llego corriendo a mi habitación entre risas y él casi pegado también entra y me agarra, pero esta vez me tira boca abajo sobre la cama, yo todavía me resisto pero él ya me sujeta con todo el peso del cuerpo. Se sienta sobre mi espalda, quedo inmovilizada y entregada a su voluntad. Queda sentado sobre mi cintura y mirando mis piernas, pone sus manos sobre mis nalgas y empieza a bajar mi pantalón jean, lo hace ...
    ... con fuerza ya que lo llevo ajustado, tira y tira hasta que logra bajarlo, estaba tan ajustado que arrastra la braga y quedo con el culo al aire, yo no le digo nada, sólo largo una carcajada y le digo.
    
    —jajajaja a ver si te atreves a meterle dedo en el culo de tu mami.
    
    —Claro que sí, el dedo y el supositorio.
    
    —jajajaja, no, no, no, jajaja
    
    Yo no sé la iba a hacer fácil, primero saco un supositorio del blíster y tiró el papel a un costado, luego empezó a separar mis nalgas con una mano para buscar el agujero y con la otra a tratar de embocar el supositorio, yo apretaba los glúteos con fuerza pero sedo enseguida. Puedo sentir que lo logra meter y lo deja en el ano.
    
    —¿lo vas a dejar ahí? Se va a salir, empújalo adentro sino se sale.
    
    No dijo una palabra, pero su dedo parecía hablar, lo empezó a empujar adentro del culo hasta que hizo tope su mano, luego lo fue sacando muy despacio y cuando lo saco del todo me pego dos veces en el culo como si fuera un tambor.
    
    —Listo, ya está.
    
    —Espera, espera, espera ¿y la crema?
    
    —¡Ahora vengo!
    
    Salto de la cama como un resorte y salió corriendo a buscarla, yo estaba recaliente, rápidamente me termino de sacar el jean y la ropa interior, me vuelvo a tirar boca abajo en la cama y quedo esperando a mi hijo con el culo al aire.
    
    —¡Acá está!
    
    —Bueno, ahora me pongo cómoda.
    
    Me puse en cuatro sobre la cama, se sienta a sobre la cama abre el pomo de crema y me la empieza a pasar por ano. Cada roce con su dedo me encendía ...