1. Mi esposa necesitaba verga y mis amigos me hiciero


    Fecha: 22/07/2021, Categorías: Sexo en Grupo Autor: libido, Fuente: RelatosEróticos

    ... jajajajaja…
    
    -Jajajajajajaja… -rió también Fernando.
    
    Después de la balada que bailaron mi esposa y Tito, ellos regresaron nuevamente con nosotros, ya estaban dando las 12.00 de la noche, todos estábamos bastante borrachos en particular Magdalena cuando ella dijo:
    
    -Aaaayyy chicos, ya estoy bastante borracha, me voy a dormir.
    
    -Nooooo –dijimos todos nosotros.
    
    -Aaaayyy… lo siento. Chau guapos… mmmmmm… que calor que hace…
    
    Se despidió mi esposa, dirigiéndose a nuestra habitación en el segundo piso.
    
    -¿Saben una cosa muchachos? –dijo Fernando- tengo una idea, esperemos unos 20 minutos a que se quede dormida y subimos todos a su habitación, a ver si sale lo que estamos deseando.
    
    -Buena idea compadre –comentó Tito- me parece excelente. Salud muchachos, salud por Magda, la voluptuosa.
    
    Después de casi media hora, decidimos ir al segundo piso, a nuestra habitación, abrimos despacio la puerta y los tres pudimos observar que mi esposa estaba tirada en la cama boca abajo con la ropa puesta, pero sin sus sandalias. Su minifalda estaba bastante subida que se le notaba el comienzo de sus grandes y lindos glúteos. Mis amigos se quedaron con la boca abierta, viendo ese lujurioso espectáculo que se les ofrecía allí mismo. Ingresamos los tres sin prender la luz, solamente nos alumbraba la luz que Tito había prendido del baño que estaba dentro del dormitorio.
    
    -Bueno compadritos –dijo Tito- es ahora o nunca.
    
    Fue entonces que Tito se acomoda en la parte inferior de ...
    ... la cama, cerca a las piernas de mi mujer.
    
    -Artemio, compadrito, los pies de tu mujer son una belleza hermano –comentaba Tito- en verdad todo el cuerpo de Magdalena es una hermosura, y también, un mar de sensualidad.
    
    Tito comienza besar y lamer primeramente el talón de la pierna derecha dee mi esposa, luego va recorriendo la planta de su pie, chupa y lame cada uno de sus dedos, va subiendo poco a poco con dirección a su muslo. Entre tanto, Fernando no espera más, se sacó toda la ropa inmediatamente, y se dejó ver como llegó al mundo, se arrodilló cerca a la espalda de Magdalena y empezó a besarle los hombros muy despacio. Yo me senté en la cabecera de la cama para ver cómo mis dos amigos comenzaban a disfrutar del cuerpo de mi mujer. Ya Tito había llegado hasta el muslo de ella y antes de proseguir también él comenzó a desnudarse por completo. A mis dos amigos se les podía notar que se encontraban bastante excitados, las dos pingas eran bastante largas y gordas en comparación de la mía. Tito prosiguió besando el muslo de la pierna de Magda, entretanto Fernando hacía lo mismo con la nuca, la espalda, los hombros y brazos de mi mujer. Esta escena ya me estaba poniendo también a mil por hora, en verdad disfrutaba mucho ver cómo dos hombres estaban deleitándose con el cuerpo de mi esposa. En eso ella hace un quejido, nosotros nos quedamos estáticos unos segundos, ella se voltea y se coloca boca arriba y fue así que le dije a mis amigos en voz baja:
    
    -¿Qué les parece si le ...
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