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Una casa de locos
Fecha: 15/11/2017, Categorías: Confesiones Autor: xavimysk, Fuente: CuentoRelatos
... comencé a tomar velocidad. Cada vez que penetraba a mamá y la base de mi pene chocaba contra su cuerpo se transmitía una onda por sus caderas que hacía temblar sus generosos glúteos y provocaba en mí un efecto casi hipnótico que me llevo a acelerar el ritmo más y más. El sonido de nuestros cuerpos chocando junto con sus gemidos era la banda sonora de la escena de sexo más morbosa que jamás hubiese imaginado. Aquel ritmo frenético junto a la excitación del momento me llevaron a un punto en el que sabía que no iba a poder aguantar más. No quería correrme tan pronto, quería alargar aquellos instantes tanto como fuera posible por lo que me detuve a descansar un minuto intentando recobrar el control de mi cuerpo. -Nooo… ¿Por qué se para?-Pregunto mamá suplicante. -Creo que me corro- Conteste. -Jajaja, dice que se corre- Repitió mi padre. -¿Qué se corre? ¿Qué te corres? ¿Y a que se supone que estas esperando?- Pregunto mi madre desesperada y con toda su fuerza echo su tremendo culo hacia atrás clavándose mi polla tan profundamente como pudo y apretándose fuertemente contra mi cuerpo me dijo: -Lléname, lléname el coño con tu leche de una vez, vamossss. Aquello fue demasiado. Sentí las contracciones del orgasmo apoderarse de mí, sentí como el semen presionaba la base de mi polla y pude notar todos y cada uno de los chorros de esperma recorriendo su tronco y descargando en el interior del coño de mamá mientras que este, llevado también por sus propio clímax ...
... comenzó a contraerse apretando mi miembro en un intento de ordeñar hasta la última gota de leche. -SÍÍÍÍ… sí… sí gritaba mamá llevada también por el orgasmo. Fue largo y fue muy intenso. Cuando por fin recobre el control de mi cuerpo retrocedí con cuidado hasta que mi pene abandono el coño de mamá arrastrando consigo un hilo mezcla de semen y flujo materno muestra del mar de fluidos que inundaba en ese momento el sexo de mi madre. Pensé entonces que todo había acabado. Trataba de recobrar el aliento cuando mi padre se tumbó en la cama y deslizando sus pies por entre las piernas de mamá situó su polla a la altura del coño chorreante. Mamá no lo dudo un momento, tomo con su mano el miembro de mi padre y tras acomodarlo en la entrada de su sexo se dejó caer sobre este hasta clavárselo por completo. -Ummm, sí, lléname tú también, quiero que me llenéis el coño de leche hasta que rebose. Estaba totalmente alucinado, con los ojos abiertos como platos y sin saber qué hacer ni qué decir. Pensé por un momento que sobraba en ese momento, pero de nuevo fue mamá quien tomo la iniciativa y girándose hacia mí me alargo su mano. -Vamos ven aquí cariño, sube a la cama. Tome su mano y me guio hasta situarme de pie en la cama, frente a ella, y con un pie a cada lado de mi padre que disfrutaba de la cabalgada que mamá le estaba regalando. Mi miembro semierecto y mojado por la mezcla de nuestros fluidos colgaba a escasos centímetros de su cara. -Déjame que te limpie hijo. Con ...