Mi problema moral - Relatos Eróticos

Mi problema moral

... bueno si necesitas algo avísame

-Vale- contesté

La idea

En cuanto cerró la puerta, una idea un tanto excitante me invadió mi cabeza: ¿y si averiguo hasta dónde es capaz de llegar mi madre? Así sabría si ella se exhibió o fue pura mala suerte

Hola hijo ¿necesitas algo? Me preguntó agitada y sudorosa por el ejercicio

Ella estaba haciendo spinning con la bicicleta a toda velocidad

-En realidad vine a ofrecerte mi ayuda jeje- dije excitado

¿Tu ayuda? Me vendría genial jejeje

Pero dime hijo ¿Acaso sabes usar estas máquinas mejor que yo? Si todo el día estás jugando jajaja

-Ay mamá tú no sabes nada- dije- en internet uno se entera de todo, de mejores métodos, mejores máquinas, mejores rutinas jeje

¿En serio?- paró en seco-

-te lo juroo mamá- dije impresionado por su incredulidad

Sí, pero primero termina tu ejercicio

Está bien mi niño- dijo alegre

Mientras ella pedaleaba con fuerza, me hice el fisgón y distraído, como si buscase algo; ella me miraba curiosa pero sin dejar de pedalear, busqué al lado de algunos aparatos hasta que me coloqué justo atrás de ella, me hinqué y cogí una pesa muy liviana; cuando la tenía en mis manos comencé a hacer repeticiones pero con la novedad de no despegar mi mirada de sus nalgotas vibrantes y esplendidas; verlas con aquel meneo me provocaba una degustación magnifica que sólo acrecentaba mi lívido por ella, aumentaba mis ganas de tocárselas, de sentirlas ¡vaya! Incluso en una pequeña fantasía me vi ...

... bajándole aquel short para de inmediato saborearle todo su espectacular culo sin tregua.

Mientras yo alucinaba, ella no dejaba de pedalear cada vez más fuerte, cada vez con mayor energía ocasionando con ello flexiones de pompa tan sensuales que tuve que cerrar las ojos por momentos para evitar una erección que evidenciara mis intenciones; cuando los volví a abrir casi me infarto por lo que vi ¡su short se estaba recorriendo con cada flexión! De modo que el inicio de sus bragas blancas, una delgada y pequeña con detalles elegantes, ¡era visible! Pero su short no se detuvo ahí! Continúo bajándose hasta dejar en evidencia el inicio de sus regordetas y blancas nalgas ; de nuevo pude apreciar aquel monumento con cada uno de sus detalles que lo volvían irresistible, sus pequitas, su color, su forma, su tamaño !Hasta su dulce aroma! ¡de pronto! Y sin saber por qué, ella levantó su culazo del asiento, pero sin despegar su pies de los pedales y comenzó a esprintar con una velocidad digna de una atleta

¡Wooow! Si mirar su culazo perfecto y vibrante me enloquecía, ahora mirarle las nalgas en pompa y en movimiento con su short de ese modo ¡casi me infartan!

¿lo levantó para calentarme? ¿Será cierto? O sólo lo hizo como parte de su ejercicio?- me pregunté angustiado

Ella divertida me dijo:

Uuyyy mi niño ¡ayudame con mi short jajaja!, ¡que se me baja!- rio divertida ¡pero sin dejar de agitarlas!

De inmediato le ayudé, aunque me costó mantener la calma, controlar mis dedos y no ...