Mis sementales I - Relatos Eróticos

Mis sementales I

.....no podía moverme, de la descarga de adrenalina y del placer que había sentido en aquel establo, tampoco mis sentidos estaban alerta, pues me pareció escuchar a lo lejos un relincho pero creí que era solamente producto de mi imaginación, que equivocado estaba!
Mientras me intentaba recomponer del episodio de sexo zoofilico que me satisfizo enormemente e intentaba ponerme de pie, sentí que llegaba un equino mas a la estancia en la que estaba con el burro y su compañía, pero cual fue mi sorpresa al descubrir que había llegado un caballo semental, que en ningún momento hizo ademán de ir al pesebre, todo lo contrario,se acercó, me lamió las nalgas y muslos,con una lengua ancha y fina arrancándome verdaderos escalofríos de placer, no había manera de levantarse, aún me temblaban las piernas.
Se tomó su tiempo, lamiendo y tensando su gran polla que era enorme, mis ojos solo veían esa super polla, no podía dejar de mirar y sentir que mi pene estaba duro y muy tieso, y que voy a decir de mi ano que volvía a palpitar,estaba aún destilando los jugos de mi cuerpo junto con el semen de burro que había en mis entrañas pero deseaba aquel trozo de carne que estaba al alcance de mi mano, me mantuve como con el burro, con las piernas flexionadas, haciendo un esfuerzo,pero mereció la pena.
Poco a poco empezó a impacientarse y a emitir pequeños relinchos, empezó acercándose y a rozarme con su cabeza por los flancos, lamiendo una nalga de un lado y el muslo del otro,me estaba calentando a ...

... punto de derretirme de ansía porque me montara y sentir la embestida pero se tomaba su tiempo.....
No sabía si me mantendría sin resbalarme de la bola de hierba,pues estaba mojada de sudor y semen por partes iguales. 
Sentí que sus manos se apoyaban en mis hombros, creí que me iba a aplastar pero no fue así, estaba calculando donde apoyarse, parecía que no era la primera vez que lo hacía con un humano, corrigió su posición, pero entonces sentí que su tranca me estaba empujando, buscando mi orto, no tuvo que apuntar mucho, en la primera embestida rozo el interior de mi muslo y mis cojones que estaban llenos de nuevo, y en la segunda intentona mi nalga derecha. Ya no hubo mas errores, la embestida fue brutal, entró en mi con una fuerza bestial,mis terminaciones nerviosas estaban trabajando al mil por mil, estaba corriéndome de gusto de nuevo, tenía toda mi tripa y mi pecho mojado de semen y seguía destilando liquido,si mi ano no llega a estar lubricado por la montada anterior me hubiese roto mi orto,entró en mi un buen trozo de caballo, pero no se hizo esperar el resto, en la siguiente embestida me despego del suelo y entraron otros quince centímetros de polla de caballo, estaba perdiendo pie, cada vez que apoyaba los pies en le suelo, no estaba en la posición anterior, el semental también corregía su trayectoria de embestida,estaba literalmente empalado por un caballo semental,las oleadas de placer llegaron como un tsunami,me daba igual si me la sacaba por la boca, estaba en ...