Mi Hija se volvió mi Amante y después mi Mujer - Relatos Eróticos

Mi Hija se volvió mi Amante y después mi Mujer

... la verga y poco a poco se la fui metiendo.
Karen: Haaaaayyyyyy duele pero sigue que quiero ser tu mujer
Y con un suave pero firme movimiento se la comencé a meter y sacar cada vez más profundo sentí claramente la resistencia que puso el himen cuando mi verga se afirmo en él y entonces con un rápido y fuerte envión se lo rompí y sentí como mi pene comenzaba a entrar cada vez más profundo lo hacía muy suavemente para que te fueras acostumbrando a tenerla adentro.
Cuando sentí que mis bolas se afirmaban en su culito me quedé quieto para que te relajaras y comenzaras a gozar.
Karen: Haaaaaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyy! ¡huuuuyyyy! Me duele papiiiiiiiiii! ¡ahhhhhhhhh! Pero me encanta
Murmuraba mientras la besaba y acariciaba su cuerpo
abrazados mientras de sus ojos brotaban lágrimas que yo bebí una a una mientras le besaba todo el rostro y le hacía suaves caricias hasta que se sintió ya bien y comenzó a moverte suavemente mientras se abrazaba fuertemente a mi cuello y también respondía a mis besos.
Karen: Entraste me estas revolviendo todo adentro papi querido que hermoso lo que estoy sintiendo me hiciste tuya ¡soy tu mujeeeeerrrrrrrr! ¡soy tu hembraaaaaa!
– cogeeeeeeme……….
cogeme mucho papi.
Yo: si, mi tesoro 
Estuvimos cogiendo más de una hora Cambiamos varias veces de pose.
Por momentos nos quedábamos quietos y nos besábamos y luego seguíamos.
Lo hicimos sin ningún apuro y gozando mucho de cada momento.
A los pocos minutos parecía ya ser una experta hembra cogiendo; ...

... lo hacía como la más experta.
Sentí que tuvo varios orgasmos en los que se retorcía y gritando me decía:
Karen: Quiero más… quiero mas no pares… cógeme fuerte… destrózame la concha…
De pronto sentí que acababa y le dije:
Yo: Mi bebé voy a acabar, te voy a acabar adentro de tu conchita, adentro de la que desde este momento es mi conchita, te voy a echar la leche adentro mucha leche te la voy a echar adentro de tu conchita.
Karen: SIIIIIII papi la quiero adentro quiero sentir como me llenas de leche
Acabamos juntos fue sensacional mi nena estaba abajo mío y se retorcía de placer gritando aullando yo también gritaba junto con ella realmente la llené de leche fue una venida interminable uno tras otro, chorros de leche llenaban tu raja hasta inundarla por completo.
Yo: Te Amo Bebe le gritaba, mientras la abrazaba y besaba sin descanso.
Karen: Yo también te amo papi querido.
Nos quedamos yo arriba y tu abajo con la verga adentro hasta que lentamente se fue ablandando y sola salió de tu raja que latía y se contraía mientras me ronroneabas denunciando la mayor felicidad.
Entonces me bajé.
Quedamos tendidos uno al lado del otro abrazado y sin decirnos nada y Sin darnos cuenta nos dormimos.
Nos levantamos y fuimos al baño a bañarnos luego la sequé y la llevé en brazos a mi cuarto y cogimos nuevamente durante más de una hora sin parar hasta acabar nuevamente llenándole otra vez de leche su raja.
La situación había cambiado desde entonces mi hija se había vuelto mi amante ...