1. Divina y Consuelo


    Fecha: 20/11/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: LARRY1954, Fuente: SexoSinTabues

    Les relato que por medio de las páginas sociales de contactos por internet con mujeres que buscan hombres, conocí a una mujer madura que la naturaleza la hizo ser llenita, pero con una pechonalidad que a cualquier hombre lo volvería loco. Sus senos y su trasero eran su mejor carta de presentación. Nos empezamos a cartear electrónicamente, hasta el punto en que descubrimos los atributos de cada quien. Durante nuestras conversaciones por video llamada, sin tocar temas sexuales, ella se mostraba con una vestimenta ligera que al agacharse o recostada salían a relucir Divina y Consuelo, sus dos grandes tetas, sus senos. Las ganas por tener el contacto directo con las nenas, hicieron que hiciera un viaje a uno de los estados colindantes con Estados Unidos. Al llegar a su estado en la República Mexicana, nos saludamos, abrazamos y nos dimos un beso como sello de bienvenida y con gustó viajamos rumbo a la ciudad dónde ella vivía. Durante el viaje sus atributos se marcaban en la blusa que traía puesta. Y pensé que esas dos nenas iban a ser mías ese mismo día. Llegamos a la habitación, acomodé mis cosas y sin más preámbulo, fuimos a comer a un restaurante. Bebimos ‘mojitos’ y ‘piñas coladas’ y llevamos al hotel el vino tinto. Brindamos por conocernos y llegar al hotel, nos aseamos y pude ver ya de cercas que realmente que tenía buenas tetas y un buen culo, algo que a los hombres nos encanta. Ella se pegó a mí para abrazarla, y se volteó pegando su culo en mi verga y empezamos con un ...
    ... cachondeo, un tocadero de sus senos, ella toma mi mano derecha y la mete bajo su pantaleta y paseo mis dedos por su clítoris y al llegar a sus labios vaginales, siento lo húmedo, mejor dicho, siento lo empapado en que se encontraba su cueva vaginal, escurriendo sus néctares entre sus piernas. Ella se frota su culo sobre mi intimidad, algo que inevitablemente hizo que tuviera una pequeña erección, me estaba excitando, mientras tanto sus pezones ya estaban erguidos y con mis dedos de la mano izquierda los acaricio con frenesí, hasta que se da vuelta y me pide que se los bese. No pude evitarlo, mi calentura pudo más que la razón, le comencé a besar los pechos, metiéndome sus pezones a la boca, agarrándole solo una teta con ambas manos de gustando su sabor. Las tenía tan ricas que me descontrolé y comencé a chupárselas fuertemente, mientras ella ronroneaba de placer. La tendí sobre la cama y ya directamente, le devoré las tetas, acostándola de espaldas, se las devoré con alevosía, mientras ella me acariciaba los cabellos gimiendo suavemente. Estaba enfermo de caliente, con la verga activa, pero no erecta por mi impotencia. Mi amiga estaba muy caliente y se retorcía de gusto, con las piernas abiertas, pidiéndome que le chupara sus senos más fuerte. Divina y Consuelo, son en ella su punto G. Me tenía loco, que tetas más ricas, realmente exquisitas, ella movía sus piernas abiertas de lado a lado, hasta que no me controlé y le agarré el culo, manoseándoselo, calentándome cada vez más, ...
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