Esposos complices cap 5 - Relatos Eróticos

Esposos complices cap 5

Habian transcurrido tres semanas que el muchachito nos visitaba para descargar en mi esposa toda su leche guardada de los 7 dias. Habia tomado confianza, ya no tartamudeaba, y se desenvolvia mejor en lo social como en lo sexual, tomandose sus tiempos.

Todo marchaba dentro de lo pensado, hasta que una noche mi jefe habló conmigo, iniciando con estas palabras. Voy a hablar contigo como amigo y espero asi lo pienses tú tambien. ( No imaginaba lo que me diría ). A  mi único hijo al que quiero mucho, no lo puedo ayudar pero tu si lo puedes hacer y te ruego lo ayudes para sentirme tranquilo.

Su amigo (el muchachito que va a mi casa ) le confio de tu buena acción al conseguirle una señora para que lo inicie en la vida sexual dejandolo muy satisfecho, está contento, ha dejado la masturbación y está mas deshinibido y el cambio es a todas luces muy positivo.

Amigo, eso quiero para mi hijo, si me haces ese favor, yo te recompensare , pero ayudalo. Despues de escuchar todas sus palabras le dije que ese tema nunca se debio divulgar mas alla de las personas comprometidas, por que esa señora bien claro dijo, que si alguien más se enteraba, ella no continuaria con ésta ayuda

Al pedirle nuevamente este favor se daría cuenta que se ha roto la reserva del caso y todo se iria por la borda. Respondiendome el jefe que le diga que él habla conmigo sin saber nada del muchachito. A lo que le dije, que lo pensaria y vería la forma de ayudarlo.

Pasaron 15 dias y mi esposa me solicitó ...

... donar sangre para su mamá que estaba muy delicada de salud y no encontraba donantes, amablemente atendi a su pedido. Y esa noche queria plantearle el asunto pero no sabia como. Utilize como estrategia una pregunta que le hice ¿ A ti que te gusta el sexo fuerte  y que va de acuerdo a tu caracter, dime te gusto la agresividad del primer dia que te cogio el chiquillo que parecía una maquina de perforación y que ahora ya se ha moderado ?.

Mientras le acariciaba el clitoris y estaba arrechandose le insistí una respuesta. Y su respuesta fue que SI que parecia un torito y sin medir dolor ajeno la clavo de golpe y con un mete y saca, terminar en un desborde de leche, pero ahora habia bajado su intensidad. 

Le dije que la primera vez que el hombre prueba una mujer, siempre marca la diferencia y por eso ambos lo recordaran toda su vida.

Llegando al mas alto nivel de nuestra arrechura la monte y la fui clavando poco a poco, mientras le decia que había un nuevo chico con la misma necesidad, me miró fijamente como queriendo recriminarme lo dicho, pero le ganó la arrechura, diciendome entre jadeos y esta vez como piensas hacerlo, la respuesta fue la misma de la vez anterior. Deja todo por mi cuenta. Y nuevamente me fijó la mirada diciendo. Pero te aseguro que no habrá un tercero. Y se dejo abandonar al placer por que ya lo tenia todo adentro y yo me esmeraba agradecido por su bondad y antes de expulsar mi leche se lo puse en su boca y como siempre esa garganta se lo tragaba.

Hablé ...