Mi calentura por mi sobrinito. - Relatos Eróticos

Mi calentura por mi sobrinito.

Hola!
Antes que nada, quiero agradecer sus comentarios.
Criticones! No soy poeta ni catedrático en letras, así que perdonen mis horrores ortográficos. 

Todo comenzó cuando tuve la oportunidad de tener acceso a una computadora, comencé a navegar por el Internet.  
Como todo joven hambriento de contenido sexual, me dedique a buscar paginas de pornografía. y así fue como cada vez mas iba yo entrando en un mundo mas profundo de contenido sexual: sexo hetero, gay, bisexual, zoofilia, hasta que me encontré con el sexo incestuoso.

De inmediato, aparecieron mis primeras fantasías incestuosas.
Así pasaron los años, hasta que cumplidos los 38, se me presento la primera oportunidad.

Tengo un sobrino, al que llamare Pedro, que en ese momento tenia 11 años. Un niño muy travieso, y muy loco. Siempre tuvo mucha confianza conmigo, por lo que era normal que se quedara solo en casa conmigo.
Cuando los visitaba en su casa, el pedía jugar conmigo, y como muchos niños bruscos y toscos en el juego le gustaba jugar luchitas.
Así que jugábamos mucho. Poco a poco fui notando, que le gustaba que yo lo atortujara contra el sillón, la cama o el piso. 

Un día, mientras jugábamos, lo tire en el piso, y le coloque mi pierna directamente sobre su pene, y vi que no le disgusto, al contrario, siguió forcejeando mas. Acto seguido, le puse mi pie sobre su pene, he hice una especie de vibración, lo que le encanto, y reía como loco, mostrando una erección, muy buena para su edad. 

Así ...

... pasaron los días, yo los visitaba y jugábamos mucho.

Un día, lo dejaron a mi cuidado. Mi mujer se fue con mi cuñada, mama de Pedro; a vagar por las tiendas.
Estábamos viendo TV, cuando empezó a molestarme. El quería jugar.
Así que empezamos a jugar. Al principio un juego y forcejeo normal. Pero yo me empece a a imaginar, jugando con el, y jugar desnudos. Yo siempre había fantaseado con el incesto, pero todo era eso: fantasía nada mas.

Así que seguí jugando con el, pero ya con malicia y excitación. Lo tiraba contra el sofá, las paredes, la cama, y todo donde cayera.
Lo agarraba contra mi abdomen, y pegaba mi sexo contra sus nalguitas, así que mi erección fue haciéndose cada vez mas grande.
El la noto, por un momento me miro fijamente, y luego bajo la mirada hacia mi entre pierna, se rió como loco, me dijo: tío tu pene esta muy grande y duro! a lo que le respondí: si así se pone cuando esta feliz. pero no es grande, en chico. Acto seguido me desabroche el pantalón, y me lo bale con todo y bóxer. Y le dije: ves que no esta muy grande! El se rio mucho, y me dijo: si es! es mucho mas grande que el mio!y con toda naturalidad se bajo su short mi me mostró su pene erecto. Y  me dijo: ves! te digo que el mio es chico. 

Para todo esto, yo seguía con mi pene en la mano. Un pene de tamaño normal de18 cm,  y sobandolo de forma lenta. Para este momento, yo parecía un tarro de aceite derramándose, por lo abundante de me lubricacion.
Para romper con el trance, me abalance sobre el. Y ...