Pagando la visita - Relatos Eróticos

Pagando la visita

... los testículos hasta el ano y se detiene allí para chuparme, lamerme, como pidiendo entrar, me voy muriendo lentamente de placer, es tanta mi calentura que ya no me importa nada, mis labios se abren y rodean gustosos la verga de su amiga y la ensalivo bien antes de metérmela hasta el fondo de la boca y cuando choca con la garganta, la saco toda mojada, le brota un jugo viscoso y lo junto con la lengua para distribuirlo, goloso, por la cabeza y el tronco y tiembla élla también y los ojos se le van para atrás. Vanessa se levanta y se va en lo mejor.
- Qué haces ?
Le pregunto pero no tarda en regresar y, sin avisar, me entra un dedo lubricado con algún aceite, porque se desliza sin roce, bien adentro y al llegar al límite de lo que puede meter, lo deja inmóvil, pero en seguida lo saca y yo me quedo esperando, y cuando vuelve mete dos, y como ya la cola se acostumbra, se abre sin problema y después de los dos, siento la punta de su verga de tamaño descomunal peligrosamente en la entrada de mi ano y que me provoca un suspiro que suena apagado por la verga de Joselyn en mi boca, era mi primera vez y la estaba disfrutando. Vanessa se aferra a mis caderas para ayudarse a entrar y respira agitada, yo quiero que se venga inmediatamente, no soportaría que la metiera siquiera a la mitad, así que la ayudo, moviéndole el culo en su ritmo, no tarda mucho y descarga chorros de semén dentro de mi con unos gritos ahogados y en medio de convulsiones, sólo entonces le libero la verga a ...

... Joselyn que está gozando de lo lindo, y me levanto, de más está decir lo exitado que estaba, pero aún sin eyacular. Me giro y enfrento Vanessa y nos besamos, fundiendo nuestras lenguas, ansiosos, calientes, y mientras nos besamos, entre ambos me deslizan hacia abajo, despacito, siento las manos de Joselyn que me atraen que me jala por la cintura y al final del camino mi cola tropieza con la punta de la verga de ella que la acomoda para que enfile directo hacia mi ano, me dejo caer y siento la cabeza que entra y me arranca un grito dolorido, pese que la tiene solo un poco más chica que Vanessa, pero ya había incrustado toda la cabeza, sentía mis nalgas rosar sus piernas.
- No Joselyn, no, es demasiado grande !
Pero no me dirige la palabra y, en vez, me atrae hacia élla un poco más y me duele, pero cuando abre el esfínter ya no me molesta más, y me penetra pasa sus manos por debajo de mis brazos, se aferra a mis hombros y me baja completamente, hasta que me quedo sentado en élla, con todo adentro, la cabalgo suave, como trotando en cámara lenta, y entonces el grito sordo me sale desde adentro sin pensarlo.
- Vanessa, qué has hecho conmigo ?
Vanessa no responde pero empieza a besarme y lleva mi mano entre sus piernas para enseñarme que la tiene otra vez dura y me la ofrece, y como yo ya estoy dispuesto a todo, la acaricio, la masturbo y después se la chupo y dejo que entre y salga de mi boca a su antojo, tan caliente escena que se estaban dando conmigo no pudo soportar más y ...