El semental de confianza -4 (Final)
Fecha: 22/11/2017,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Thomas, Fuente: CuentoRelatos
... cuerpos.
Ramón se tiró de espalda en la cama. Ana y Patty siguieron la moción, recostándose una a cada lado de su semental, besándolo, alabándolo y acariciando su cuerpo, mientras el con cada mano acariciaba sus desastrosas cabelleras.
Ana, después de un buen rato, sugirió que se bañaran los tres. En la regadera se acariciaron intensamente aún a pesar de la falta de espacio. La hermosa Patty jugueteaba con su semi-flácido pene, mientras sus tres bocas se trataban de unir con sus ardientes lenguas.
Por fin Patty pudo arrodillarse y mamar el pene de Ramón, mientras éste y Ana se comían a besos.
Ramón se vistió con su infalible pantalón corto rápidamente y se dedicó a ver la ceremonia de arreglo de las bellas mujeres.
“¿Qué tan probable sería que me arrimaran a su mamá?”, preguntó Ramón.
“Mis papás saldrán de viaje”, contestó Ana. “Si, el miércoles”, agregó Patty.
“¿Y de cogerme a las tres hermanas juntas?, insistió.
“Claudia sale de vacaciones mañana martes. Estará libre del miércoles en adelante”, dijo Patty.
“Yo soy tuya cuando quieras”, agregó la muchacha, en tono juguetón.
“Las dos serán mías cuando yo quiera”, dijo el fogoso albañil. “Ya tengo la colección completa”, agregó.
“Hay algo de cierto en eso”, dijo Ana acerándose a besarlo.
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Patricia se dio cuenta que su hija llevaba un vestido de Ana cuando regresó a su casa, un par de horas después.
Al saludarla de nuevo, admiró su radiante presencia, ...
... recién bañada y pintada, dejando tras de sí un agradable olor.
“Mmmm”, expresó la bella madre, “veo que les fue bastante bien hija”.
“Digamos que si mamí”, contestó la muchacha. “Bastante, bastante bien”, agregó.
“¿Ya no tenemos que planear el romántico encuentro en la alberca, por lo que veo?”, continuó Patricia.
“No mami, ya no”, contestó su hija menor. “Ya no…, es todo un garañón tal y como lo platicaron. Nos hizo trizas a las dos”, dijo suspirando.
“¡No me digas que juntas!”, exclamó Patricia.
“¡Si mami! ¡Hicimos trío! ¡Nos dio hasta volvernos locas!”, casi gritó Patty.
“¡Que suertuda es mi hermana!”, agregó.
“Propuso cogernos a las 4 juntas. Dice que le alcanza”, comentó.
“¡Ay hijita, no, eso sería ya demasiado!”, dijo Patricia en tono conservador y recatado.
“¿No se te antoja?”, preguntó Patty. “¡No me digas que no se te antoja!, hoy mañana, antes de que te vayas”.
“¡Ay hija!”, contestó Patricia, “podemos tener un problema serio con tu hermana o entre nosotras. Esto ya es demasiado intenso”.
“No podemos estar usando al pobre hombre de garañón todas al mismo tiempo, lo vamos a matar, además, tiene esposa”, dijo Patricia a manera de consideración y lástima.
“¡Pero con esa verga que tiene mami…! ya no se ni qué hacer con César, no me va a llenar!”.
Patty y su madre se abrazaron. “Es que en verdad es increíble hija”, la consoló Patricia.
“Mira, yo tengo algunos años haciéndolo con Ramón y tu padre y he sobrevivido”, agregó. “No ...