Amor de tres - Relatos Eróticos

Amor de tres

... en mi cabeza y empezó a follarme por la boca haciendo que su verga llegará hasta mi garganta, mientras Esteban me follaba el trasero cada vez más rápido hasta acabar dentro de mí con gemido de placer, Esteban se levantó de la cama cuando su verga perdió su erección y Guillermo sacó su verga de mi boca y se acostó en la cama haciendo un 69 conmigo y comenzamos a mamar nuestras vergas.
Yo estaba cómo poseído chupando la verga de Guillermo, chupe y lamí ese tronco hasta que lo hice acabar a mi boca y trague cada chorro de semen sin derramar una sola gota, ahora Guillermo comenzó a pajearme hasta hacer acabar y Esteban se acercó y entre los dos chuparon mi verga y lo limpiaron de los restos de semen que quedaban.
Me sentía cansado y dolía la mandíbula de tanto que le mame la verga a Guillermo.

Me levanté de la cama y fui al baño a limpiar los retos de semen que había en mi trasero, y como aún era de día decidimos dormir los tres un rato antes de salir a dar un paseo por la playa. Al despertar nos vestimos y salimos a comer y después a caminar por la playa, ya era muy tarde y casi no había nadie en la playa, después de casi una hora caminando y conversando regalamos a la casa y fui yo quien propuso volver a tirar y me acerque a Guillermo para desnudarlo y él sin pensarlo me besó y metió su lengua en mi boca y agarró mis nalgas, y me cargo y mientras me sostenía así me llevo a la cama.
Esteban tampoco perdió tiempo y se quitó su ropa y fue a la cama y comenzamos a besarnos ...

... los tres, yo aproveche para tomar las agarrar la verga de Guillermo y la de Esteban con mis manos y empecé a chuparlas, metía una en mi boca y después la otra. Luego hicimos un triángulo en la cama para mamar nuestras vergas, en esa posición yo quedé chupando la verga de Guillermo, y Guillermo chupaba la verga de Esteban y Esteban chupaba la mía. 
Así estuvimos durante un buen rato chupandonos y manoseandonos hasta cansarnos de estar en posición, yo quería que Guillermo me cogiera así me monte encima de él y comencé a cabalgar su verga, pude sentir lo largo que es su pene sentía que me taladraba bien adentro, levantaba mi trasero y me dejaba caer sobre su tronco y cada embestida me hacía dar gritos de placer, Esteban se acercó por atrás y metió un dedo en mi ano mientras Esteban me follaba, luego se echó lubricante en la mano y metió dos dedos en ano, y luego comenzó a meter su verga en mi ano, le suplique que se detuviera que me dolía mucho pero Esteban me sostuvo para que no me levantara y siguió empujando su pene hasta que entró por completo, ahora estaba siendo penetrado por dos grandes vergas.
Yo empecé a dar quejidos de dolor y placer a la vez, pero el placer superaba el dolor, y poco a poco Guillermo y Esteban sincronizaron  sus movimientos para follarme los dos, nunca pensé que la doble penetración sería tan excitante, fue tanto mi excitación que mi orgasmo se hizo inminente y acabe sobre el pecho de Guillermo sin necesidad de masturbarme. Guillermo y Esteban acabaron ...