1. Mi primera vez con una mujer.


    Fecha: 08/04/2020, Categorías: Bisexuales Tus Relatos Autor: deadpool9, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... retos de besos, le dije que me dejara meterle los dedos a su vagina, y dijo que sí, así que le metí la mano debajo de su pantalón y de sus pantys, y le metí el dedo índice. En cuanto lo metí, me sentí sumamente a gusto: se sentía caliente, sentía acogedor, me encantaba. Duré 2 minutos así, hasta que le pregunté si le metía otro, dijo que sí, así que procedí a meterle el dedo de la mitad y moverlos suavemente en círculos, meterlos y sacarlos. Fue excitante, aunque no entendí el porqué me encantaba, pues soy gay. No le presté atención a ponerme en duda, y llegué a la conclusión de que, mujer es mujer, hombre es hombre, con los dos puedo disfrutar por igual... Seguí con mis dedos ahí, hasta que, con la otra mano le metí los dedos a la boca, y ella empezó a lamerlos. Ipso facto me puse completamente erecto y se lo dije, hubo un silencio mientras seguíamos en nuestro pequeño morbo, y me bajé los pantalones hasta las rodillas, me masturbé con la mano que ella lamía y le bajé y le quité los pantalones a ella, quedó solamente con su buzo de pijama. 
    Quién lo diría, mi primera vez con una mujer sería a mis 19 años. Bueno, no lo pensé y la penetré, y Dios Santo, qué delicia penetrar a una mujer. Esa vaginal se sentía caliente y estrecha, se sentía el calor en todo mi pene. Apenas entré en ella, gimió entre dientes pues su primo estaba en la habitación de al lado. Empecé con la faena, le daba suave y con cariño, me gustaba tocarle los senos mientras tanto. Esataba acostada boca ...
    ... arriba, abierta de piernas, y yo sobre ella, con los pantalones abajo, y con la camiseta puesta, pero con el frente detrás de mi cabeza, por no quitarmela completamente. Duramos así 10 minutos, hasta que lo saqué, la senté a ella y empezó a chupármelo, y vaya que lo hacía rico. Mientras lo hacía, le acariciaba el cabello y le tocaba los senos. Le di la vuelta y la puse en 4 sobre la cama, y empecé de nuevo a darle. Se sentía delicioso, y me gustaba como gemía. Después la acosté boca abajo, la hice acostar de lado con las pierna un poco levantada para poder darle mientras ella estaba acostada de lado, y seguí dándole delicioso. Me incliné hasta sus senos y se los lamí, se sintió muy rico besarle sus bellos pechos. Ella gemía y me rasguñaba las piernas, la espalda, me agabarraba el cabello y me apretaba contra su cara para besarla. Me encantaba lo dura que era para el sexo, lo basta y tosca que se volvía en cuanto la tenía ensartada. 
    Se la saqué, la levanté y me acosté, y la puse arriba de mí, y fue la mejor pose que pudimos hacer: sus gemidos y sus jugos vaginales se sentían sublime mientras yo admiraba esa figura de mujer. Le puse las manos por detrás y le agarraba sus nalgas con fuerza, la inclinaba hacia mí, la abrazaba mientras nos besábamos, y le daba rápido y fuerte, ella solamente podía gemir. Después nos levantamos, la puse acostada de lado de nuevo y seguí dándole con ímpetu, hasta que sentí que me iba a venir, se la saqué de su vagina y me vine en su muslo. Ipso facto me ...