1. MI PRIMER AMANTE.


    Fecha: 16/04/2020, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: UNA MUJER CASADA., Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... cerrados enterré mis uñas en sus brazos al sentir por primera vez en mi vida el placer del sexo. Él me encontró muy cerrada de mi chocho, a juzgar por los quejidos de placer que daba y los besos con que me premiaba.
    Así se vino dentro de mí cuatro veces sin sacarme su verga. No usamos condón...en ése tiempo no se usaba.
    Después de la cuarta venida, sacaba su verga de mi chocho y descansaba por unos segundos nada más...y volvía a cojerme...yo estaba asombrada con su aguante. No sé si tomó algo o se untó algo para aguantar tanto. 
    Recuerdo que la cama rechinaba y ese ruido sólo lograba ponerme más caliente.
    Sentí muy mojadas mis nalgas, en un descanso me fijé y ví una gran humedad en las sábanas...era tanta leche que me había echado en mi rajita y que ahora escurría fuera de ella formando un hilo blanco, nacarado y cálido, que, pasando por mi virginal chiquito, llegaba a las sábanas de la cama.
    Le pedí permiso de ir al baño para limpiarme y me dijo que no usara papel, que mejor me lavar.
    Al sentarme en la taza del baño pujé para sacar lo que tenía adentro y me asombró la cantidad de leche que aún guardaba yo dentro de mi concha...se veía tan rica que no pude evitar probarla...ay! qué delicia...la leche tenía un sabor exquisito!
    Pensé en mamarle la verga al salir del baño...y así lo hice. Tomé su verga, un poco floja y me la metí a la ...
    ... boca... comencé a chuparla...era la primer verga que yo mamaba en mi vida, ni a mí marido se la había yo mamado en los dos años que llevábamos de casados.
    Ahí fué que aprendí lo que se siente que una verga se esté parando dentro de la boca. Es algo muy especial...delicioso!
    Más o menos a los diez minutos de mamársela, sentí de pronto que su verga se ponía más dura y caliente...y de repente, sentí cómo me disparaba dentro de la boca ricos chorros de crema, de leche, me llegaron hasta la garganta y tuve que tragármelos...estuvieron maravillosos...me tomó de la cara y me agradeció con un rico beso en la boca, tan tierno que puedo jurar que era de amor, más que de sexo.
    Me enamoré de ese hombre... sólo él supo sacar de mi a la puta que todas llevamos dentro.
    Olvidé a mi marido, mi juramento de fidelidad... olvidé el decoro, todo, todo lo olvidé... sólo quería vivir para seguir disfrutando de esa verga y de su leche.
    Al terminar yo ya era otra, era ya una.mujer madura, orgullosa y feliz de ser mujer, porque al fin había conocido el verdadero placer sexual.
    Ví a mi amor desnudo y ví su verga que ahora, pequeña y satisfecha descansaba tímidamente sobre sus huevos... sentí una mezcla de agradecimiento, de placer, de ternura y de amor...me agaché y le dí un beso.
    Así fué como me volví una verdadera mujer, caliente, enamorada de los hombres....y muy puta. 
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