1. Mi tía Julia sufrió las consecuencias de mi calentura.


    Fecha: 26/11/2017, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Yo vivo en un pequeño pueblo de 2500 habitantes. Voy a la escuela de noche ya que de día debo ayudar en la estancia de mi padre que está a unos 4 Kms. del pueblo. Tenemos sembradíos de soja y criamos caballos de pura sangre. Los vendemos y también tenemos algunos para competir en las cuadreras locales. En definitiva, el hecho es que hay mucho trabajo que hacer a diario, y yo no tengo hermanos varones. Sí tengo dos hermanas menores que yo. Josefina de 14 y Esther de 12 años. Las dos son preciosas, gringas rubias de ojos verdes. Iguales a mi mamá. Yo también soy rubio pero de ojos grises, como mi padre. En cambio el es morocho, de tez mate y ojos grises. Mi tía, su hermana es igual a él. Los fines de semana en el campo siempre caen visitas, si no son familiares son amigos, siempre se hacen asados, donde la mayoría de las veces terminan casi todos borrachos. Estábamos en los primeros días de diciembre, el calor ra insoportable. Ya a las diez de la mañana rondaban los 34°C. Nosotros no teníamos pileta en el campo. Si teníamos un gran tanque australiano que era llenado por un molino, y desde allí se repartía el agua para los bebederos de los animales. Siempre estaba casi rebalsando de agua. Era una excelente opción para estos días de calor. Un chapuzón y a seguir trabajando. Mi padre es una persona muy estricta, no le gusta que ande perdiendo el tiempo. Dice que tengo que aprender para poder administrar y mantener a la familia cuando el no esté. Creo que faltan como 50 años para ...
    ... que eso pase. Obviamente como a las once de la mañana cayó la parentela, es que mi viejo había matado una ternerita y preparaba un asado con cuero. Los había invitado a todos. Vinieron sus padres y mis abuelos por parte de Mamá. El hermano de mi padre con sus tres hijas, y finalmente en su minicooper azul, mi tía Julia. Ya al momento de bajarse ella del auto y acercarse a saludar, casi me da un infarto. Traía un short pequeño de lycra que le marcaba tremendamente la cola de bailarina clásica. Y se notaban muy bien sus labios vaginales, gorditos, apretaditos. Seguro vió mi cara de tonto, baboso, ya que se me arrimó y apoyandome sus tetitas en mi pecho desnudo, me da un piquito y me dice con ojos picarones, como anda mi sobrino preferido? Y la muy guacha me pellizcó una tetilla. Como estaban todos no pude devolverle nada. Simplemente me reí. Se hizo la hora del almuerzo y empezaron a tomar vino en bota. Todos prueban y se ríen mucho y al final, se les sube el vino a la cabeza. Terminan como dije antes, todos borrachos. Inclusive mi tía Julia. A mi no me dejaban tomar, salvo algún traguito a escondidas. pero en eso mi padre es muy estricto, igual que con el cigarrillo. Me dijo que si se enteraba que yo fumaba me iba a quemar las pelotas con el mismo cigarrllo que este fumando. Y creanme que seguro lo hace. Mi viejo cuando promete, cumple. Luego de comer, todos a dormir la siesta, yo no tenía ganas y me fui para el lado de los caballos, entré a la caballeriza, allí el aire era más ...
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